Julieta Cardinali, una de las figuras más reconocidas del cine y la televisión argentina, vuelve a ocupar titulares, pero esta vez fuera del set. La actriz se consolida como empresaria textil al frente de su propia marca de indumentaria, Cardinal, un emprendimiento que refleja su interés por el diseño y la moda nacional.
Su firma, fundada hace seis años, se define como una Pyme artesanal con estética de lujo, donde cada prenda es diseñada bajo la supervisión directa de Cardinali.
Sin embargo, la marca se convirtió en tema de debate tras su paso por el programa La noche de Mirtha (eltrece), donde habló del negocio, los precios y las dificultades de mantener una empresa de diseño en el actual contexto económico.

Cardinal: ropa de lujo “hecha en casa”
Los precios de Cardinal no pasan inadvertidos. Según su tienda online, las prendas se ubican en el segmento de alta gama del mercado argentino.
Las camperas de jean, uno de los ítems más buscados, comienzan en los $ 220.000 y llegan hasta los $ 315.500, mientras que los sacos sastreros —el corazón de la línea— alcanzan valores de entre $ 291.000 y $ 325.000, dependiendo del modelo y los materiales.
En el segmento más informal, una remera estampada cuesta alrededor de $ 70.000, y los vestidos livianos pensados para el verano se ofrecen a $ 185.000. El denim, una de las especialidades de la marca, incluye jeans desde $ 53.600 hasta $ 198.200, y polleras de jean que se ubican en torno a los $ 140.800.
El catálogo también incluye accesorios premium: carteras de cuero reptil a $ 295.000, cinturones de cuero vacuno a $ 97.500 y bijouterie con baño dorado, como collares de $ 58.700. Todos los artículos mantienen un diseño minimalista, líneas limpias y acabados de confección artesanal.

Una Pyme personal en medio de la crisis
Durante la entrevista televisiva, Cardinali explicó que maneja su emprendimiento “de manera muy chiquita” y que lo considera “un espacio creativo más que un negocio masivo”. “Me entretiene, me gusta, pero está difícil”, reconoció.
La actriz apuntó contra las políticas del gobierno de Javier Milei, al afirmar que “el rubro textil está siendo castigado” y que las ventas “cayeron mucho” en los últimos meses. Sus declaraciones generaron controversia en redes, donde muchos cuestionaron el contraste entre los precios de su marca y su discurso sobre la crisis del sector.

El momento más comentado del programa llegó cuando Mirtha Legrand le preguntó si llevaba puesta una prenda de Cardinal. Julieta respondió que no, que ese día vestía un diseño de Jazmín Chebar. “¡Tenías que venir con tu ropa, para hacerle publicidad!”, la interrumpió la conductora, provocando risas en la mesa.
El rango de precios —desde $ 53.600 hasta $ 325.000— posiciona a la firma en el universo del diseño boutique, orientado a un público que busca exclusividad.


























