Village Roadshow Entertainment Group, productora de Joker, de Matrix y de otras franquicias como Ocean’s Eleven, La Gran Aventura Lego y Wonka, se ha declarado en bancarrota.
La firma lo oficializó bajo el Capítulo 11 de la Ley de Bancarrota de Estados Unidos, proceso que permite a empresas y personas reorganizar sus deudas y activos sin tener que liquidar todos sus bienes.
En otras palabras, Village Roadshow Entertainment Group se ha declarado en “quiebra de reorganización”.
La información la ofreció en carácter de primicia el sitio The Hollywood Reporter, que especifica que el procedimiento se efectivizó este el lunes ante el Tribunal de Quiebras de Estados Unidos para el Distrito de Delaware.
“En la presentación, Village Roadshow presentó su disputa de arbitraje con Warner Bros. por The Matrix Resurrections como un punto de inflexión, poniendo fin a lo que había sido su acuerdo comercial más lucrativo”, detalla THR.
“Village Roadshow había demandado por incumplimiento de contrato después de que WB estrenara la película de la franquicia en Max el mismo día de su estreno en cines, lo que le ha costado a la compañía 18 millones de dólares en honorarios legales, cifra que sigue aumentando”, amplía.
“Históricamente, la compañía disfrutó de una prolífica relación de coproducción, cofinanciación y copropiedad con WB, que incluía la producción, la propiedad y los derechos derivados de 89 títulos, incluida la franquicia Matrix, y comprendía la gran mayoría del negocio de los deudores”, señala el documento, firmado por Keith Maib, director gerente de Accordion Partners y asesor de reestructuración de Village Roadshow.
“Incluso si se resuelve el arbitraje de WB, la compañía cree que ha diezmado irreparablemente la relación laboral entre WB y la compañía, que ha sido el nexo más lucrativo para el éxito histórico de la compañía en la industria del entretenimiento”, continúa el documento.
La compañía presentó activos valorados entre 100 y 500 millones de dólares, y pasivos entre 500 y 1.000 millones de dólares, siempre de acuerdo a THR.
Village Roadshow ha tenido unos meses difíciles que culminaron con la declaración de quiebra de este lunes. El director ejecutivo Steve Mosko renunció a principios de este año, y múltiples rondas de despidos han dejado solo una plantilla mínima.
El año pasado, el WGA añadió a Village Roadshow a su lista de huelga tras no pagar a los guionistas, lo que puso de manifiesto la grave situación financiera que atravesaba.
“La presentación indica que Village Roadshow había contratado a Goldman Sachs para que lo asesorara sobre una posible venta el año pasado y había encontrado un comprador interesado, pero el arbitraje de WB ‘impidió la posibilidad de cerrar la transacción’”, cierra THR.