Sandra Borghi se despidió de la pantalla de eltrece tras haber formado parte de la señal de manera ininterrumpida durante 25 años. La periodista, que hasta este viernes encabezaba el noticiero Mediodía Noticias, anunció el cierre de una etapa profesional que calificó como fundamental para su carrera y su vida personal.
Los motivos de su alejamiento
Durante la emisión de su último programa, Borghi explicó que la resolución de alejarse del canal fue un proceso meditado que le llevó tiempo concretar. La conductora señaló que su intuición le indicaba la necesidad de “moverse hacia algún lugar” y buscar nuevos rumbos.
“Me costó muchos tomar esta decisión... pero siento que es el momento de hacerlo; nadie se arrepiente de ser valiente en esta vida”, expresó la comunicadora ante sus compañeros de equipo. Según sus declaraciones, cumplir 50 años representó una “bisagra emocional” que la impulsó a tomar decisiones y buscar un cambio de aire.
La periodista recordó una frase de su colega Santo Biasatti, quien le dijo alguna vez que la profesión no es un “deporte para quedarse quietos”. Esta premisa fue uno de los motores que la llevó a considerar que su ciclo en la señal de Constitución había llegado a su fin.
Un cuarto de siglo en la señal
Borghi ingresó a la empresa hace 25 años y destacó el crecimiento experimentado en ese lapso. “Entré siendo una y me voy siendo otra; este canal me dio todo lo que soy hoy como profesional y como persona”, aseguró emocionada durante el brindis de despedida.
En sus declaraciones, Sandra hizo especial mención a su compañero de dupla, Luis Otero. Trabajar con él representó cumplir un anhelo de su padre, quien era seguidor del periodista por su afición compartida al club Racing.
Futuro profesional
Respecto a sus próximos pasos en los medios, Borghi no brindó detalles sobre un destino confirmado, definiendo su salida como una elección de cierre. “Elijo cerrar un ciclo; los voy a volver a ver, no sé dónde ni cuándo porque no me voy a ningún lado”, aclaró para llevar tranquilidad a su audiencia.
