Joel Ojeda, exconcursante de Gran Hermano, relató la “odisea” que vivió cuando la policía se presentó en su domicilio tras ser acusado de promocionar casinos ilegales.
Ojeda describió como “completamente exagerado” el operativo y negó haber sido esposado o detenido en diálogo con LAM.
Todo comenzó luego de que la Fiscalía Especializada en Juegos del Azar ordenara la investigación de Ojeda por promocionar apuestas ilegales en historias.
Aunque en un comienzo se reportó que el joven había sido detenido, él desmintió esta versión categóricamente. “Eso no es cierto... No me pusieron nunca esposa. Yo me entero cuando ellos se van de mi casa porque la noticia salió desde mi casa”, dijo.
Según relató Joel, el incidente ocurrió a las 6.30 de la mañana mientras él estaba durmiendo en la casa de su madre. El operativo involucró 12 efectivos policiales que intentaron ingresar de forma violenta a su hogar.
Una vez dentro, la presencia de la policía se extendió por tres horas y media. Según contó, los agentes buscaban principalmente dispositivos electrónicos, incluyendo tablets, computadoras y celulares.
Entre los artículos incautados se llevaron una computadora su teléfono celular, lo que le impide actualmente acceder a sus cuentas bancarias.
Añadió que el pedido de poner las manos atrás fue una solicitud de los agentes, y él acató porque se sintió “completamente indefenso” ante la situación. Sospecha que este pedido fue parte de una “jugada mediática... un circo mediático” y actualmente se encuentra asesorándose legalmente para saber los pasos a seguir.
Su objetivo primordial es recuperar sus pertenencias, pues asegura que no tiene “nada que esconder”.
Ojeda cree que el verdadero objetivo de este allanamiento es intentar que muchos famosos dejen de publicar contenido sobre casinos, y que las autoridades deberían concentrarse en quienes verdaderamente están infringiendo la ley.