Rocío Pardo y Nicolás Cabré celebraron su casamiento este sábado en Córdoba. Luego del civil, la directora teatral vivió su “tardía” despedida de soltera y al día siguiente ambos se dispusieron a festejar su gran boda en la estancia Bosque Alegre, rodeada de naturaleza y árboles centenarios, cerca de Villa Carlos Paz.
La ceremonia (que según trascendió, se extenderá hasta este lunes) se realizó con un hermetismo total y pocos son los detalles que se filtraron a través de las redes sociales.
Hasta el momento, ninguno de los protagonistas compartió imágenes del evento, salvo Ro que publicó un carrusel de fotos en Instagram donde mostró la intimidad de su despedida de soltera “ya casada”.
Según informó el Doce, la ceremonia fue íntima y muy emotiva, compartida con sus seres más cercanos. En algunas notas previas, la pareja, que ya lleva casi dos años junta, coincidió en que celebrar en Córdoba fue “la mejor decisión juntos”.
Uno de los momentos centrales de la boda fue la participación de Rufina Cabré, hija del actor y la China Suárez, a quien se le asignó el rol clave de llevar los anillos de la pareja. Este gesto fue propuesto por Rocío, dada la relación cercana que construyeron.
El look “rebelde” de Nicolás Cabré
El gran protagonista de la noche en cuanto a estilo fue Nicolás Cabré, quien decidió romper los moldes de la vestimenta tradicional de boda. El actor buscó un estilo que reflejara su personalidad relajada y auténtica, pidiéndole a su diseñador, Daniel Casalnovo, no ser el clásico “muñeco de torta”.
“Cuando vino me dijo ‘quiero estar diferente, no quiero ser un muñeco de torta, quiero un traje en color crudo, quiero estar sin corbata, en zapatillas para traje y tiradores’”, relató el diseñador en el programa Secretos Verdaderos.
El outfit de Cabré se confeccionó siguiendo los detalles del pedido y se combinó con zapatillas para traje y tiradores antiguos con botón. Casalnovo reveló que el actor fue muy puntilloso y preciso con lo que quería, rechazando incluso la sugerencia de un traje celeste.
Cabré también se encargó de la vestimenta de sus caballeros de honor, entre los que se encontraban su hermano, Duilio, y sus amigos de la infancia de Mataderos. Les pidió que usaran el mismo traje, pero en un color ligeramente más oscuro o “más tostado”.
Los vestidos de Rocío Pardo
Por su parte, Rocío Pardo optó por dos diseños creados por la diseñadora de alta costura Ana Pugliesi. El proceso de creación de sus vestidos, uno corto y otro tradicional largo, llevó aproximadamente seis meses de trabajo artesanal.
“Con Ro nos conocemos por una amiga en común. Le sugirió, le mostró mi trabajo y vinieron al atelier. Así fue la primera entrevista y ella me parecióremacanudadesde el primer momento. Es una chica muy especial, me encantó“, contó Pugliesi en una nota para Infobae, quien viajó exclusivamente a Córdoba para vestir a la novia.
La diseñadora, que también creó el vestido para Rufina, destacó la química inmediata con Rocío, describiendo el proceso como “muy cálido”. Los dos diseños de Rocío mantuvieron un “hilo conductor” en cuanto a textura y diseño, reflejando su personalidad.
“Los vestidos reflejan su personalidad. Ves cada uno y decis ‘son Ro’. Terminamos haciendo cuatro pruebas, puede haber alguna que fue intermedia, pero así en general fueron cuatro. Íbamos programando de acuerdo a su agenda y sus viajes, fue muy accesible en cuanto a esto, añadió.
Así es el salón donde se casaron Rocío Pardo y Nicolás Cabré
La pareja eligió el lujo histórico de Bosque Alegre, una joya colonial en Córdoba del siglo XVIII con 7 mil hectáreas, para su unión. Se estimó que cada cubierto superaba los 120 dólares por persona. Todo lo pagaron los novios.
Este tesoro arquitectónico es una casona colonial del siglo XVIII, y está ubicada estratégicamente a menos de una hora de la capital provincial, rodeada de bosques.
El lugar es conocido por su exclusividad y gran carga histórica. Es tal el nivel de privacidad y espacio que la estancia cuenta con 7 mil hectáreas, lo que la convierte en el sitio predilecto para grandes celebraciones elegidas habitualmente por empresarios, políticos y otras personalidades.
Aunque el lugar es enorme, Cabré y Pardo optaron por una propuesta íntima, prefiriendo mantenerse lejos de las multitudes, con un estilo que promete ser elegante y natural.
La intención es que los invitados disfruten de una boda al aire libre, aprovechando el entorno mágico que logra combinar la tradición de la estancia con el romanticismo puro de la naturaleza cordobesa.
Hace meses, el periodista Gustavo Méndez, en el programa Mujeres Argentinas, resumió el concepto del evento, asegurando que “será un casamiento de un cuento de hadas”, una boda totalmente soñada.
Se reveló que el menú fue gourmet y estará basado en productos de estación, reforzando el concepto de una celebración glamorosa y auténtica. “Tiene 30 habitaciones. 24 las tienen ellos con sus amigos y familiares”, señaló Casalnovo.
