Después de romper el silencio en una nota con LAM, Araceli Salto estuvo este viernes en el estudio del programa y amplió los detalles de su relación con Roberto García Moritán.
La mujer aseguró que lo conoció antes de su matrimonio con Pampita, pero afirmó que continuaron viéndose durante esa etapa, e incluso llegó a ir a la casa que compartía con la modelo.
Según relató, el vínculo empezó como un juego y terminó volviéndose más intenso, aunque marcado por la discreción: nunca hablaban por teléfono ni se enviaban audios, y los encuentros se pactaban con dirección y horario. “Iba con capucha, él me pedía que me escondiera”, contó, al recordar una visita al hogar familiar donde notó fotos y objetos personales de Pampita.
Araceli también sostuvo que el empresario hablaba mal de su esposa y que la relación no era buena. “Ella tenía un carácter muy difícil”, dijo, aunque evitó repetir textualmente los comentarios de Moritán.
La joven concluyó que se sintió usada y que recién tiempo después tomó conciencia del impacto de esa historia en su vida.