En una entrevista con el podcast Miss Me?, Billie Eilish confesó haber sido víctima de ghosting. O en otras palabras, haber padecido la repentina desaparición de alguien con el que había comenzado a relacionarse sentimentalmente tanto en redes como en la vida real.
La cantante más joven en ganar dos Grammy lo reveló en diálogo con su colega Lily Allen y la periodista Miquita Oliver, conductoras del ciclo de la BBC mencionado al comienzo.
“Definitivamente me han ghosteado”, disparó Eilish ante la pregunta puntual, y de inmediato contó que tal cosa ocurrió en diciembre de 2023, cuando ya tenía estatus de estrella pop.
“Literalmente increíble. Hasta el día de hoy, no volvió a enviarme mensajes. Yo estaba como ‘¿Te has muerto? ¿Te has muerto?’” sumó.
“Era alguien a quien también conocía desde hacía años y teníamos un plan (...) ‘Esta es mi dirección, vení a las tres de la tarde’; nunca más supe de él. Nunca. No me lo podía creer”, precisó luego, dejando en claro el género de quien la ghosteó.
Más adelante, Eilish reveló que luego vio que el sujeto en cuestión estaba saliendo con otra persona: “Y yo estaba como ‘¡Oh!’. Pero no sabía que la gente todavía hiciera eso. Realmente no sabía que la gente hacía eso”.
“Era alguien a quien también conocía desde hacía años; nunca más supe de él. Nunca. No me lo podía creer”, señaló la cantante, quien hace unas semanas publicó Hit Me Hard and Soft, su tercer disco de estudio. Y quien hace un poco más ganó junto a su hermano Finneas el Oscar a la mejor canción con What Was I Made For?, compuesta para la banda sonora de Barbie.
La cuestión es que Lily Allen, Miquita Oliver y la misma Billie Eilish podían concluir que podés ser exitosa, famosa o adorada por millones y aun así sufrir los padecimientos de cualquier persona en el llano más absoluta.
Más de Eilish al respecto: “Bueno, perdí a todos mis amigos cuando me hice famosa. De repente era famosa y no podía relacionarme con nadie. Fue duro. Fue muy duro”.
Billie Eilish y la tardanza en recuperar a sus amigos
En este punto, Billie contó que Zoe, su mejor amiga, Zoe, nunca la abandonó, pero que hubo un momento en que sus únicos amigos eran sus empleados. “Y entonces fue mi cumpleaños de 20 y recuerdo que miré alrededor de la sala y sólo había gente a la que empleo. Y todos con 15 años o más que yo”, precisó.
De todos modos, la artista contó haber aprendido que una relación laboral no necesariamente se traduce en una amistad. Y dio el ejemplo de un empleado suyo que le renunció y nunca más volvió a contactarla para nada. “Y fue lo peor que me pasó. Y eso me hizo darme cuenta de que ‘Oh, esperá, esto es un trabajo’. Si se van, nunca más volverán a verme”, resaltó al tiempo que dejó en claro que, desde ese desencuentro, le cuesta ser simpática con la gente con la que trabaja.
Todo esto, dijo, le ayudó a reencontrarse con viejos amigos: “Hace exactamente un año me reencontré con un montón de viejos amigos y ahora tengo muchísimos. ¡Ahora tengo un equipo! Podría literalmente llorar por eso. Ha sido lo más grande que me ha pasado”.
Como para dejar en claro que no exageraba, Billie Eilish recordó una reciente after party de Coachella. “Yo estaba como ‘Chicos, tengo amigos.. Ha pasado tanto tiempo desde que he tenido amigos. ¡Los quiero!’. Lloré…”, finalizó.
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