“Todo pasa” es uno de los himnos más potentes de Los Piojos, una canción que marcó a toda una generación desde su lanzamiento en el disco 3er Arco de 1996. Aunque su letra fue interpretada por muchos como un reflejo de la ansiedad y la desigualdad social de los años noventa, su origen es mucho más íntimo y desgarrador.
Andrés Ciro Martínez, líder de la banda, compartió la historia real que inspiró su creación, revelando un oscuro episodio de manipulación y engaño.
La historia real de “Todo pasa” de Los Piojos
En un vivo que hizo en redes sociales, el artista contó que la canción nació del recuerdo de una chica con la que había salido tiempo atrás. Años después de dejarla de ver, Ciro se la encontró y la invitó a un show de Los Piojos, pero ella lo rechazó. Al preguntar por ella a su familia, le contaron que estaba en una relación con un hombre que “la tenía encerrada”.

Pasaron unos 15 años hasta que Ciro volvió a verla, cuando ella, trabajando como moza en un bar, lo reconoció. Fue entonces cuando ella le relató la pesadilla que había vivido. Su pareja la había convencido de que era un escritor ganador de un premio de la embajada de Francia y con un libro en proceso, que, por ello, no podía trabajar.
Bajo este engaño, la mujer terminó manteniendo económicamente no solo a este “parásito y psicópata”, sino también a la madre de él. El manipulador la había aislado por completo de su familia y amigos, “comiéndole la cabeza”.
El castillo de mentiras se derrumbó un día que ella volvió a casa antes de lo previsto y lo encontró sentado en un café, descubriendo que él nunca iba a ningún lado a escribir. Con esa dolorosa historia en mente, Ciro escribió la letra de Todo pasa durante un viaje a España.
Así, una experiencia personal de manipulación se transformó en una poderosa crítica al egoísmo y un mensaje de esperanza.