El anuncio del regreso de Soda Stereo con el show multimedia Ecos empezó con el pie derecho.
La banda agotó tres funciones y ya lanzó una cuarta fecha para junio. Con tecnología de última generación, Charly y Zeta reviven la voz y la guitarra de Gustavo Cerati “en un espectáculo único en Latinoamérica”.
Soda Stereo sigue marcando hitos en la música argentina y latinoamericana. Tras agotar en tiempo récord las funciones programadas para marzo y abril en el Movistar Arena de Buenos Aires, la banda anunció una nueva fecha de su show Ecos para el 4 de junio.
La demanda fue tan grande que ya se habla de sumar más presentaciones e, incluso, llevar el espectáculo por Latinoamérica.
Cuánto cuestan las entradas para Soda Stereo
Las entradas, disponibles únicamente en movistararena.com.ar, ofrecen distintas ubicaciones:
- Campo parado: $ 80.500
- Platea baja: entre $ 115.000 y $ 207.000
- Platea alta: entre $69.000 y $103.500
“Ecos”: una experiencia impensada
El show promete ser una experiencia inédita. No se trata de un tributo ni de una reedición de Gracias Totales, aquella gira que reunió a diferentes artistas invitados.
Esta vez, Soda Stereo estará completo en el escenario: Zeta Bosio y Charly Alberti tocarán en vivo mientras la voz y la guitarra de Gustavo Cerati sonarán, según lo informado por la producción, gracias a un trabajo minucioso de producción y a la utilización de tecnología de vanguardia, sin reducir a simples archivos audiovisuales.
Las tomas originales de Gustavo, grabadas a lo largo de distintos conciertos —incluidos los de la gira Me verás volver en 2007—, fueron cuidadosamente seleccionadas y ensambladas. Zeta y Charly deberán ensayar intensamente sobre ellas para lograr una sincronía perfecta y devolverle a los fans la experiencia de ver y escuchar al trío en escena.
Los organizadores aseguran que será “un espectáculo nunca antes visto en Latinoamérica”, con una puesta visual y sonora superadora, ideal tanto para quienes acompañaron a Soda desde los años 80 como para quienes nunca pudieron verlos en vivo y ahora tendrán la oportunidad de cumplir un sueño que parecía imposible.
Habrá que ver, pero por lo pronto, la curiosidad y las ganas de estar ahí fueron más fuertes y ya consiguieron un aluvión de interesados en no perderse la experiencia.
