En una charla profunda y sin filtros en los estudios de Vorterix, Lali Espósito se reencontró con Mario Pergolini para hablar principalmente del lanzamiento de No vayas a atender cuando el demonio llama, su último disco. Sin embargo, la charla también atravesó otros temas como el difícil momento que vivió tras ser el blanco de ataques de diversas figuras de la política, en especial del presidente Javier Milei.
De todas maneras, el momento más emocionante de la charla fue cuando la cantante se emocionó en vivo tras escuchar las conmovedoras palabras que le dedicó el conductor.
Pergolini fue directo y con tono reflexivo puso el foco en la integridad con la que Lali atravesó la polémica.
“Me gustaría que te quedes con esto del final, porque acabás de decir algo que está súper lindo: ‘Yo quiero que me vean íntegra y me siento íntegra’”, destacó Mario. Y continuó: “No muchas estrellas, sobre todo las mujeres y jóvenes, que tendemos a subestimarla, logran algo que a mí me llamó mucho la atención: que fue cómo te defendieron”.
Pergolini fue más allá y explicó por qué consideraba tan significativo ese respaldo popular hacia la artista.
“Porque demostraste eso, que sos íntegra y que entendieron cómo fue tu camino. No mucha gente lo ha logrado. A Mirtha Legrand le costó incluso de grande. Recién ahora alguien le está tirando buena onda. Eso no se logra así nomás siendo artista”, afirmó, reconociendo que la legitimidad de una figura pública no se construye únicamente con aciertos, sino con un recorrido sincero y sostenido.
“Lali, eso se logra con muchas cosas, incluso con discos malos, a lo mejor con series malas o con cosas muy buenas. Poder mostrar que uno es íntegro y que se merece la defensa sin pedirla. La verdad, Lali, yo te felicito que hayas logrado todo eso, porque todo lo que hiciste artísticamente en parte construyó eso”, concluyó Pergolini, con una mezcla de admiración y afecto genuino.
La reacción de Lali: lágrimas, sonrisas y música
Mientras Mario hablaba, las cámaras captaron cómo a Lali se le llenaban los ojos de lágrimas, visiblemente tocada por las palabras. Al notar su emoción, Pergolini trató de alivianar la situación con delicadeza: “Uy, no era para eso. Te pido mil disculpas”, dijo, entre serio y sorprendido.
Pero fiel a su estilo y con esa chispa que la caracteriza, Lali salió del momento con naturalidad. “Voy a poner Fanático para levantar”, bromeó.