Este sábado se realizará la Final Red Bull Batalla 2024 en el mítico estadio Obras de Buenos Aires. El evento llega tras el recordado sold out en el Quality Arena del año pasado, en el que triunfó Jesse Pungaz venciendo al cordobés Larrix, en un notorio choque de estilos y talento.
Para esta competencia, son muchos los freestylers de renombre que intentarán hacerse con la plaza que los lleve a la Final Internacional de España, que tendrá lugar el próximo 30 de noviembre. Los mencionados anteriormente, Stuart, Alkoy, CTZ, Nasir Catriel y Jaff, entre otros, conforman los 16 finalistas. El oriundo de Villa Carlos Paz, Mono Strong, es uno de los favoritos.
El joven de 23 años fue subcampeón de la Final Regional y tras esa disputada batalla con Jaff, decidió poner un freno y viajar a Brasil para hacer un borrón y cuenta nueva.
En diálogo con La Voz, el rapero admite estar con nervios y ansiedad por la competencia que se avecina. “Se sabe que va a haber un nuevo campeón y sabemos lo que nos jugamos, entonces, en la previa hay mucha tensión en el ambiente. Me siento bien y creo que tengo muchas posibilidades”, comenta.
Consultado por la final regional que se le escapó, resalta su disconformidad con la decisión de los jueces. Mono Strong considera que esa batalla fue suya. “Me quedé con la sensación de felicidad en el cuerpo porque pude rapear a mi máximo nivel, quería demostrar eso. Con respecto al resultado, yo difiero de la decisión final y la tensión que siento ahora es por eso. Te puedo decir que quizás me faltó un poco de resistencia y asegurarme la victoria en mi batalla, pero Jaff, al venir de Mendoza y estar de visitante, se montó una especie de David contra Goliat y, por supuesto, destaco los huevos que le metió para salir adelante en una situación complicada”, explica.
–¿Estás con sed de revancha?
–Sí, pero es una gran revancha contra mi yo del pasado, contra mi yo de la regional y contra este gran desafío que vengo buscando hace más de tres años. Como todo cordobés, voy a representar el underground de la plaza y dejar todo por los pibes. Me van a ver tirar unos flows, romper madres, ganar, ganar y ganar y dejar bien en alto la bandera de los pibes.
–¿Por qué te fuiste a Brasil?
–Justamente fue después de la final. La búsqueda era un poquito tranquilizarme en un par de aspectos y tratar de crecer. Sentí que había tocado un techo y había llegado a un punto bastante satisfactorio en cuanto a mi rap y mi faceta como artista. Había rapeado a la gorra toda la temporada y con ese ahorro me fui a dar una vuelta. La idea era aprender otro idioma y vivir otras experiencias. Si bien viajé, tenía boleto asegurado en esta final y sabía que iba a volver. Pero me fui a nutrir de la calle de Brasil y su rap.
–¿Qué cosas pudiste sumar de esa experiencia?
–Te diría que todo. Hubo aspectos del Hip Hop que se involucran en las competencias que las vi más de afuera. Estaba muy de visitante y eso me ponía en un lugar hostil. La gente te ve con un preconcepto o prejucio según el lugar de dónde sos o por tu color de piel, la ropa que vestís. Son desconfiados. Claro que tuve que aprender a rapear en portugués y el lenguaje era una debilidad. No sé si debilidad, quizás sabía que iba a perder pero me metía para ir tomando el estilo de ellos. Eso fue para aprender, deconstruir y construir mi estilo, intenté escuchar, traducir, y competir mucho. Es loco porque allá hay 100 competidores anotados y los que rapean se sortean hasta quedar 16. Es como que está librado al azar. Te haces un viaje hasta Capilla del Monte y capaz llegas y no te toca. Pero el under va por otro lado, el brasileño va a compartir, estar de fiesta y pasar un buen rato. Y gana el que el público decide, siempre. Por grito y aplauso.
–¿Te preparaste de una manera intensiva para la Final Nacional de este sábado?
–Sí. Me tuve que exponer bastante a un par de competencias underground, no solo de mi ciudad sino también de afuera para, como te digo, volver a recibir esos baldazos de agua fría de despertarte, de entrenar y asumir que las cosas están cambiando y hay que seguir evolucionando. Y me pasó de no ganar ninguna compe ni un uno versus uno. Pero sí sentí que hice buenos papeles llegando a semifinales y finales. Pasaron cinco meses sin competir en español y sigo teniendo cancha, vocabulario, lírica, ritmo, resistencia y todo lo que necesita para dominar una batalla. Mañana saldré a demostrar.
–Vos, Mecha, Larrix, Naista, Barto y tantos más han dejado un legado para jóvenes de Córdoba que se inspiren a rapear. ¿Se sienten referentes?
–Ellos han dejado un gran legado. En esta provincia levantaron mucho el nivel y en las finales siempre están los nombres que me tiraste. Lo mejor de todo es que nos enfrentamos entre todos y a la vez somos muy unidos. Todos teníamos y tenemos un hambre que nos hacía retroalimentarnos. Sabemos que muchas acciones en la calle o fuera del rap deja una influencia y hubo un enriquecimiento cultural en la calle y en las plazas. Imaginate, vas a una Plaza a rapear, viene Mecha y te dice ‘che, muy bueno lo que hacés’, eso un muchachito lo puede tomar como una ayuda, un envión para seguir. No me siento consagrado como él o como Larrix pero si palpé todo su crecimiento en primera persona y sé que son inspiración para mucha gente que se quiere dedicar a esto.
Para ver
La Final Nacional Red Bull se realizará el sábado desde las 17 en el estadio Obras de Buenos Aires. La transmisión se puede seguir en vivo a través de YouTube.
