Con más de 500.000 oyentes mensuales en Spotify, The Velvet Sundown llamó la atención del mundo musical no solo por su sonido enigmático, sino por algo aún más intrigante: no tienen rastros claros en internet.
La banda no tiene presencia en redes sociales, no hay videos en vivo, ni entrevistas. Incluso su biografía en Spotify parece generada por inteligencia artificial.
En el último tiempo, la creciente presencia de la música generada por IA avanzó sin hacer demasiado ruido y lentamente se abre paso en las plataformas de streaming.
Softwares y herramientas como Suno y Udio permiten crear canciones completas con apenas unas líneas de texto. Por supuesto, muchas veces se critican estas producciones por carecer de autenticidad artística o “alma”.
Aunque la mayoría de estos temas no logra cautivar al público de forma masiva, algunos lograron dar el salto al mainstream. En 2023, una canción creada con la voz simulada de Drake acumuló millones de reproducciones antes de ser eliminada. Más recientemente, otra composición generada por IA logró entrar en los rankings musicales de Alemania.
Lo cierto es que la música generada por algoritmos está empezando a mezclarse con canciones reales dentro de playlists populares. De hecho, el sitio Music Ally advirtió que muchas de estas canciones se camuflan entre temas auténticos, acumulando reproducciones sin que los oyentes siquiera noten su origen artificial. Al parecer, así logró The Velvet Sundown darse a conocer en el mundo musical.
A pesar de su creciente número de oyentes mensuales en Spotify, no hay registros confiables de la banda o de sus integrantes.
¿Una banda creada por inteligencia artificial?
Aunque no hay pruebas concluyentes de que toda su música haya sido generada con IA, sí hay muchos indicios. La biografía de The Velvet Sundown en Spotify, que según Musicradar probablemente fue escrita por ChatGPT, la describe como una banda que “no solo hace música, sino que crea mundos”. El texto mezcla referencias a la psicodelia setentista con alt-pop y soul analógico, y cita una supuesta crítica de Billboard que dice que suena “como un recuerdo de algo que nunca viviste”.
Los integrantes mencionados –Gabe Farrow, Orion “Rio” Del Mar, Milo Rains y Lennie West– no tienen presencia en internet. No hay registros de sus nombres en medios, redes ni plataformas especializadas, lo que refuerza la teoría de que se trata de identidades ficticias.
Su sonido combina elementos del country y el rock con una estética lo-fi, similar a la que generan algunas plataformas de música por IA como Suno. Es lo suficientemente realista como para pasar inadvertido en listas de reproducción, donde efectivamente se ha detectado su inclusión. Canciones del grupo han aparecido en más de 30 playlists creadas por usuarios anónimos y también han comenzado a circular en la sección Recomendaciones semanales de Spotify, impulsadas por algoritmos de recomendación.
Además de Spotify, la música de la banda también está disponible en Apple Music, Amazon Music, YouTube y Deezer, donde algunas herramientas automáticas de detección ya la han señalado como potencialmente generada por inteligencia artificial.
¿Un disco propio?
El único álbum de The Velvet Sundown, Dust and Silence, dura poco menos de 37 minutos y fue analizado por el medio ATL, que incluso dejó que ChatGPT hiciera una reseña del disco. El resultado fue una crítica favorable: el álbum se presenta como una experiencia sensorial más que narrativa, apoyado en sonidos etéreos y letras abstractas.
Musicalmente, mezcla folk y pop ambiental. Las guitarras acústicas evocan nostalgia, las armonías flotan como neblina y las melodías se desarrollan lentamente, sin apuro. La canción principal, al igual que otras del disco como Let it Burn, apuesta por climas íntimos y susurrados más cercanos a una plegaria que a una típica interpretación.