Este lunes, Juliana “Furia” Scaglione y Claudio “Papucho” Di Lorenzo volvieron a Gran Hermano gracias al Golden Ticket. La exparticipante de la edición 2023 y el exjugador de la 2025 ingresaron a la casa por el voto de la gente y la sorpresa de sus compañeros fue colosal.
Tras la expulsión de Luca, la producción del certamen puso en juego los Golden Ticket para que reingresaran a la competencia dos exhermanitos. La semana pasada, se fueron eliminando participantes y anoche quedaron solo 10.
El primer participante en salir de la placa fue el cordobés Maxi con el 2,1% de los votos. Le siguieron Big Ari (2,9%), Alan (3,2%), Brian (4,4%), Emma Vich (6,9%), Cata (8,3%) y Luca (10,2%).
La final quedó en manos de Rosina, que terminó quedando fuera con el 16,5% de los votos. De esta manera, Claudio y Juliana se ganaron el beneficio por decisión de la gente. El santafesino logró sacar un 23,7%, mientras que la porteña se llevó un sorprendente 59,8%.
GH: Chiara y Eugenia apuntaron contra Furia
Ambos viajaron en el auto de Reverdito hasta la casa e ingresaron con música épica y en medio de un Congelados. Los jugadores más viejos recibieron a Papucho con mucho cariño (menos quizás Ulises y Luciana que estuvieron más apartados), a la vez que este bailó e hizo referencia a la ausencia de su apéndice.
Furia ingresó con la cara cubierta, a los gritos y tras los pasos de Cariño, su muñeco de ciervo blanco de la edición pasada.
A los participantes más nuevos no les cayó muy bien la llegada de los exhermanitos, menos a Eugenia que tuvo su primer y tenso ida y vuelta con Furia por suposiciones de la placa.
“Vamos a placa me haces pin...”, le confesó la tiktokera, mientras la doble de riesgo la ignoraba. “Vení, ¿por qué te vas, tenés miedo de hablar?“, la increpó enojada. “No le tengo miedo a nadie, menos en mi casa”, le contestó Furia. “Ahora es mi casa mami”, le devolvió la santiagueña. “Ah no sé, creo que es la casa de los chicos (originales) primero”, remató la porteña.
Chiara también se mostró en contra de la llegada de Juliana, pero no fue directamente contra ella, sino que intentó armar estrategia con sus compañeros. "Ella no es la dueña de la casa. Están todos encima chupándole las medias. Relajemos”, exclamó.
Por su parte, Lourdes estaba feliz de poder conocerla, pero se dio cuenta que si se acercaba demasiado podía mostrarse muy fanatizada con quien ahora, quiera o no, es su principal rival.
“Me voy a alejar un poco porque quedo re fanática, pero yo el año pasado miraba el programa por ella. ¡Y ahora juego con ella!“, exclamó la joven. ”O contra ella... Hay que ver qué pasa", le dijo Papucho.