Graciela Alfano volvió con pruebas en mano para demostrar el origen del famoso tapado de piel que María Julia Alsogaray lució en la recordada tapa de la revista Noticias en julio de 1990.
En Puro Show, Alfano mostró una imagen en su celular que, según ella, demuestra que el abrigo era suyo y no de Susana Giménez, como la diva afirmó anoche a LAM.
“Se está hablando mucho del famoso tapado. ¿Es ese el tapado original?”, le preguntaron en el programa. Graciela, fiel a su estilo, no se guardó nada. “Estaba así como endemoniada. Y del endemoniamiento caí yo, que no tengo nada que ver, que siempre caigo”, respondió.
A partir de allí, la actriz no solo defendió la veracidad de su versión, sino que también aprovechó para ajustar cuentas con Giménez, a quien señaló por haber sembrado confusión sobre la propiedad del abrigo.
“Susana, después no me vengas a llamar para pedirme disculpas como hiciste con el restaurante en Miami, que todos ahí me dijeron que vos no querías que vaya. Luego entraste, no me saludaste. Y después me llamás y me decís ‘no puede ser que yo no te haya permitido entrar’”, disparó.
Graciela también sugirió que todo podría haberse evitado con una simple llamada. “¿No sería más fácil, Susanita, agarrar el teléfono y preguntarme ‘Ay, Grace, ¿era este el tapado?, yo pensé que era uno mío’. Y yo te cuento la verdad que sucedió así”, propuso.
Sobre cómo llegó el polémico abrigo a la producción de fotos, relató: “En ese momento, los tapados de piel se guardaban en refrigeración en la peletería. Entonces, me llaman de la peletería y me dicen ‘van a hacer una producción de María Julia, ¿te importa si prestamos tus tapados?’. ‘Para nada, se los presto, divino’. Al rato me llaman y me dicen ‘usó uno de tus tapados’”.
Lejos de cualquier enojo con Alsogaray, Alfano recordó una anécdota compartida con la exfuncionaria. “Fuimos a comer con Menem y María Julia, y ella misma me dijo ‘ay, no puedo creer, me puse tu tapado’”, recordó.
Además, rememoró el impacto que tuvo aquella producción: “Ella era la ingeniera con su rodetito y, de pronto, se convirtió en un sex symbol, cosa que le encantaba”.