La noche cordobesa del jueves se vistió de gala para recibir a los Premios Sur, la ceremonia que celebra lo mejor del cine argentino. Entre los invitados, Juana Viale fue una de las grandes protagonistas, aunque no solo por su look o sus declaraciones, sino por un inesperado cruce con su expareja: José Palazzo.
La relación entre Viale y Palazzo data del año 2016 y, como comenzó con perfil bajo, terminó de la misma manera. Sin embargo, diez años después, volvieron a coincidir en un mismo evento, y las cámaras de Intrusos (América TV) no dejaron pasar el momento.
“Muy contenta de estar acá. Estamos en un teatro maravilloso y me encanta que se festeje en la provincia de Córdoba, saliendo un poco de Buenos Aires”, expresó Juana, distendida, al hablar con Pablo Layus, el cronista del ciclo.
El saludo en vivo y el apodo que llamó la atención
Layus le mencionó a Viale que su ex estaba presente en la gala junto a su esposa, Natalia Gudiño, lo que generó una rápida reacción de la conductora.
“No lo vi. Ya somos todos muy grandes, adultos y somos todos amigos”, respondió con total naturalidad. Minutos después, el propio Palazzo se acercó para saludarla.
Ante las cámaras, se dieron un beso en la mejilla, intercambiaron algunas palabras y hasta recordaron viejos apodos.
Fue allí cuando Layus le consultó a Juana por qué el productor la llamaba “Johnny”, un detalle que no pasó inadvertido.
“¿Qué sé yo? Porque es así. No tengo que explicar todo. No le explico a mi madre, ¿te voy a explicar a vos?”, retrucó Juana con una sonrisa y su característico tono filoso, cerrando así un encuentro que fue tan incómodo como simpático.