Paula Robles reapareció públicamente y fue interceptada por cronistas que la esperaban para conocer su versión sobre el fuerte conflicto que atraviesa la familia Tinelli. Todo luego de que su hija Juanita denunciara amenazas de muerte y expusiera su distanciamiento de su padre, Marcelo Tinelli.
La bailarina llegó al teatro donde protagoniza la obra Ahora vos, y aunque intentó mantenerse al margen de la polémica, no pudo evitar las preguntas sobre la situación que mantiene en vilo al mundo del espectáculo.
“Estoy bien”, se limitó a decir ante las cámaras de Puro Show, tensa e incomoda ante la insistencia de los noteros.
Cuando los periodistas le consultaron cómo estaba viviendo este delicado momento familiar, Paula apeló a la ironía: “Hermoso”.
La exesposa de Tinelli fue cuidadosa al hablar de su hija menor, protagonista del escándalo que sacudió al clan familiar en los últimos días.
“Juanita está bien. Con Marcelo se están comunicando”, expresó, confirmando que padre e hija retomaron el diálogo tras las tensiones públicas.
Luego, prefirió no seguir alimentando el tema mediático y desvió la atención hacia su trabajo artístico.
“Vengan a ver la obra. No tengo nada que decir, la obra dice todo”, comentó, en referencia a Ahora vos, el espectáculo que encabeza y que aborda temáticas vinculadas con la maternidad, la comunicación y las ausencias.
Fiel a su estilo reservado, Paula evitó extenderse sobre la interna Tinelli y defendió su decisión de no hacer declaraciones.
“¿Por qué preferís el silencio?”, le preguntó uno de los cronistas. “Porque es mi manera. No tengo nada que decir”, respondió, marcando su límite.
Contexto del conflicto
La breve aparición pública de Paula ocurre en medio de una tormenta familiar.
Días atrás, Juanita sorprendió al publicar en sus redes sociales un mensaje en el que denunció haber recibido amenazas y deslizó un profundo distanciamiento con parte de su familia.
La joven aseguró sentirse desprotegida y reveló internas que impactaron fuertemente tanto en el entorno Tinelli como en los medios.


























