Protestas en Moscú y otras ciudades de Rusia se llevaron a cabo este domingo. Los manifestantes se movilizaron contra de la invasión de Ucrania, pese a que miles de personas ya fueron arrestadas en las marchas.
Miles de personas se congregaron en las principales ciudades con carteles y gritos de “íNo a la guerra!’’. Al mismo tiempo, el dictador Vladimir Putin ordenó colocar en alerta las fuerzas nucleares disuasivas, agravando las tensiones con Occidente y suscitando temores de una guerra nuclear.
Las protestas en Rusia comenzaron el pasado jueves y siguieron todos los días subsiguientes, aun cuando la policía rusa reprimió los desórdenes con fuerza.
Las protestas del domingo parecían ser más pequeñas que las del jueves, el día en que Rusia lanzó su invasión de Ucrania y cuando miles de personas marcharon en Moscú y San Petersburgo.
En San Petersburgo, un nutrido grupo de manifestantes se concentró en el centro de la ciudad. La policía los reprimió uno por uno y los metió en camionetas policiales, a pesar de que la protesta era pacífica.
Detenidos
Un total de 4.124 personas han sido detenidas en distintas ciudades rusas tras cuatro días consecutivos de movilizaciones contra la invasión de Ucrania, según el portal independiente OVD-Info.
Hasta las 9.50 horas del domingo habían sido arrestadas 1.002 personas en manifestaciones no autorizadas en 44 ciudades rusas contra la intervención militar, de las que 484 corresponden a Moscú.
La legislación rusa obliga a notificar las concentraciones entre 10 y 15 días antes de la celebración de la protesta y prevé multas elevadas e incluso la cárcel a quienes protesten sin permiso. Sí se permiten en cambio “piquetes individuales”, aunque también se han dado casos de manifestantes que fueron arrestados cuando protestaban solos.
El pasado jueves el Comité de Investigación ruso advertía de que la participación en las protestas contra la guerra era ilegal y recordaba que los detenidos tendrán antecedentes que “dejarán una marca en su futuro”.
