Blue Origin completó el segundo vuelo de su cohete New Glenn, con destino a Marte. El despegue fue este jueves desde la Estación de la Fuerza Espacial de Cabo Cañaveral, en Florida, y transportó dos naves de la Administración Nacional de Aeronáutica y el Espacio (Nasa).
El lanzamiento estaba programado para el pasado domingo. Sin embargo, el mal clima y las tormentas solares que generaron auroras hasta el sur del estado retrasaron los planes.
El New Glenn, de 98 metros de altura, envió al espacio los dos orbitadores gemelos Escapade, que iniciaron un viaje prolongado hacia el planeta rojo. Para la Nasa, se trata de una misión científica de bajo costo con la que busca avanzar en el estudio de la atmósfera marciana.
El primer aterrizaje del propulsor
El aterrizaje se produjo sobre una barcaza ubicada a unos 600 kilómetros de la costa. Empleados de la empresa celebraron la maniobra, mientras Jeff Bezos siguió la operación desde el centro de control. “¡Próxima parada, la Luna!”, corearon tras la recuperación.
Veinte minutos después del despegue, la etapa superior del cohete liberó los orbitadores, completando el objetivo principal de la misión.
El primer vuelo del New Glenn, realizado en enero, había conseguido colocar un satélite de prueba en órbita, aunque falló en el intento de recuperar su propulsor.
Qué investigarán las naves
Los orbitadores se mantendrán durante un año en una órbita solar a 1,5 millones de kilómetros de la Tierra, hasta que ambos planetas estén alineados. Con ese impulso gravitacional, llegarán a Marte en 2027.
Una vez en órbita marciana, las naves estudiarán la atmósfera superior, los campos magnéticos dispersos y la interacción con el viento solar.
Los datos permitirán entender cómo Marte perdió su atmósfera y pasó de un ambiente húmedo a uno árido. También ayudarán a diseñar mejores sistemas de protección para futuras misiones tripuladas.
Una misión económica y estratégica
Con un costo inferior a 80 millones de dólares, Escapade es considerada una de las misiones interplanetarias más accesibles de la última década.
El cohete está nombrado en honor a John Glenn, primer estadounidense en orbitar la Tierra, y es cinco veces más grande que los New Shepard, usados por Blue Origin para vuelos turísticos.




























