En medio de la creciente afluencia de turistas argentinos en las playas del sur de Brasil, el intendente de Florianópolis, Topazio Neto, lanzó una alerta pública sobre los riesgos de consumir alimentos vendidos por vendedores no autorizados en las playas, en un video difundido a través de sus redes sociales. La advertencia surge como respuesta a un incremento en los casos de gastroenteritis entre los visitantes, enfermedad asociada a la ingesta de alimentos contaminados.
Neto señaló que los vendedores informales están aprovechando la masiva llegada de bañistas, especialmente en la temporada de verano, para comercializar productos sin las mínimas condiciones sanitarias.
Entre los productos más señalados se encuentra el tradicional “queijo”, un trozo de queso calentado a la brasa, que según el funcionario, es transportado sin los cuidados necesarios, expuesto al calor y almacenado en conservadoras a plena luz del sol, lo que aumenta el riesgo de contaminación alimentaria.
El video, que se viralizó, muestra cómo las autoridades locales utilizan drones e inspectores para monitorear las playas y controlar la venta de estos productos, con el fin de proteger la salud de los turistas. “Compren solo en lugares autorizados”, exhortó el intendente, haciendo hincapié en la importancia de evitar la compra de estos alimentos en la vía pública.
Estado de las playas
En paralelo a estas alertas sanitarias, el gobierno del estado de Santa Catarina actualizó el informe sobre la calidad del agua en las playas de Florianópolis y otras regiones turísticas cercanas. Según el Instituto Ambiental de Santa Catarina (IMA), de los 238 puntos monitoreados en la costa del estado, el 70% se encuentra apto para el baño. En Florianópolis, de los 87 puntos evaluados, 60 están en condiciones óptimas, lo que representa un 68,97% de las playas disponibles para los turistas.
Este informe tranquilizó a aquellos que temían que el aumento de casos de gastroenteritis estuviera relacionado con la calidad del agua, ya que la mayoría de las playas continúan siendo aptas para el baño.
Aumento del tráfico y tragedia en las rutas
El fin de semana también estuvo marcado por una tragedia en las rutas brasileñas. Un siniestro vial ocurrido en la BR-290, en el sur de Brasil, resultó en la muerte de un turista argentino. Gonzalo Alfredo Díaz, de 42 años, perdió la vida tras un choque en la camioneta en la que viajaba junto a su esposa, Débora Cabrera Carro, quien sufrió heridas graves y fue hospitalizada en Sao Gabriel, Río Grande do Sul.
El aumento del flujo vehicular hacia las playas de Florianópolis generó un intenso tránsito en las rutas argentinas y brasileñas, especialmente en los pasos fronterizos de Corrientes y Misiones, lo que intensificó la circulación de vehículos particulares y colectivos, así como de camiones. Este incremento en el tráfico fue evidente en las últimas semanas, con un notable aumento de turistas que eligen viajar por tierra hacia el sur de Brasil.
