La policía francesa cerró el círculo sobre la banda responsable del golpe de los últimos tiempos en el Museo del Louvre, tras detener al cuarto y último sospechoso del robo de las joyas de la corona. El valor del botín robado supera los 100 millones de euros, o unos 100 millones de dólares.
El hombre, oriundo de Aubervilliers, fue arrestado en Laval, Mayenne, por la brigada de represión del bandidaje (BRB). Fuentes de la investigación indicaron que era el último miembro del comando buscado por el robo ocurrido el 19 de octubre.
El detenido se encuentra actualmente alojado en la sede de la policía judicial de París, enfrentando cargos de “robo organizado” y “conspiración criminal”.
El audaz asalto que sacudió a París
El robo de las joyas de la reina Maria-Amelia y de la reina Hortensia se produjo el 19 de octubre a las 9:30 de la mañana.
Un grupo de cuatro delincuentes estacionó un montacargas a los pies del museo. Dos de ellos, disfrazados con chalecos amarillos para simular ser obreros, subieron a la Galería Apolo usando una plataforma. Una vez arriba, lograron acceder a las vitrinas donde se encontraban las joyas. La fuga fue tan audaz como la entrada: los ladrones se dieron a la fuga en potentes scooters.
Los sospechosos y el hilo del ADN
Los otros tres miembros de la banda ya habían sido arrestados previamente en octubre.
- Los primeros dos sospechosos, ambos de unos treinta años y también de Aubervilliers, fueron detenidos el 25 de octubre.
- La policía encontró el ADN de Abdoulaye N. -conocido en YouTube como “Doudou Cross Bitume” y con antecedentes por robo agravado- en una de las vitrinas rotas y en objetos abandonados en el lugar. Abdoulaye N., que trabajaba como chofer, admitió haber participado en el golpe “a instancias de desconocidos”.
- El ADN de su cómplice apareció en una de las dos scooters Tmax utilizadas para la huida.
- Un tercer integrante fue detenido el 29 de octubre. Este hombre era originario de Seine-Saint-Denis y contaba con once condenas previas por robos, violencia e infracciones de tránsito.
- La fiscal de París, Laure Beccuau, señaló que los sospechosos eran “todos vecinos; todos vivían aproximadamente en Seine-Saint-Denis”. La funcionaria advirtió que no eran perfiles conocidos en el crimen organizado, pero que “ascienden rápidamente hasta involucrarse en delitos de extrema gravedad”. La investigación también reveló que los sospechosos recibían instrucciones desde el exterior del país y que todos tenían vínculos en Aubervilliers.
Además de los cuatro miembros del comando, fueron detenidas otras tres personas: “un hombre y dos mujeres de 31 y 40 años”, aunque la fiscal no precisó de qué son sospechosos.
Las joyas perdidas y las críticas a la seguridad del museo
A pesar de las detenciones, las joyas robadas, que incluían diademas, broches y collares con diamantes y piedras preciosas, siguen desaparecidas.
Un elemento del botín fue abandonado: la corona de la emperatriz María Eugenia fue hallada rota en el camino de escape.
El robo reavivó fuertes críticas sobre el estado de la seguridad en el museo más visitado del mundo. El Tribunal de Cuentas consideró que la dirección del Louvre priorizó “las operaciones visibles y atractivas” en detrimento de la seguridad.
Debido a un estado de deterioro “alarmante”, el presidente francés, Emmanuel Macron, había anunciado a principios de año un proyecto “colosal” para modernizar el museo.
