Estados Unidos adoptará nuevas “sanciones” contra Moscú tras la muerte en prisión del opositor ruso Alexey Navalny, anunció este martes la Casa Blanca.
“Por iniciativa del presidente (Joe) Biden, el viernes de esta semana anunciaremos un importante paquete de sanciones para que Rusia rinda cuentas por lo ocurrido a Navalny”, declaró a periodistas el vocero del Consejo de Seguridad Nacional, John Kirby, informó la agencia de noticias AFP.
Según el consejero, las nuevas sanciones responden también a “todas las acciones (de Moscú) que forman parte de esta guerra cruel y brutal que asola Ucrania desde hace dos años”.
Días después de la muerte de Navalny, Biden había adelantado a periodistas que estaban “estudiando sanciones adicionales” a Rusia, y señaló al presidente ruso, Vladimir Putin, como “responsable” de la muerte del opositor.
Biden y otros aliados occidentales ya habían impuesto duras sanciones a Rusia para frenar las acciones de Moscú en la guerra con Ucrania, de la que se cumplen dos años el próximo sábado.
El mandatario estadounidense también dijo que “espera” que este caso sirva para poner de manifiesto la importancia de mantener la ayuda militar a Ucrania, en tiempos de guerra con Rusia, después de que la oposición republicana se mostrara reacia a un nuevo paquete de fondos y amenazara con bloquearlo en la Cámara de Representantes.
Navalny, opositor ruso y principal adversario de Putin, murió el viernes pasado a los 47 años en la cárcel del Ártico en el distrito autónomo de Yamalia-Nenetsia donde cumplía una pena de 19 años.
Según los servicios penitenciarios rusos (FSIN), el recluso comenzó a sentirse mal y se desmayó tras dar un paseo. Los médicos de la prisión acudieron de inmediato a prestarle asistencia, pero no reaccionó.
La viuda acusó ayer a Putin de “matar” a su marido y anticipó que continuará la lucha del activista.
“Putin mató a mi marido”, dijo ayer Yulia Navalnaya en Bruselas, antes de reunirse con los cancilleres de la Unión Europea, a quienes instó a imponer duras sanciones sobre Moscú y el mandatario ruso.
El Kremlin calificó hoy de “infundadas” las acusaciones.
“Evidentemente se trata de acusaciones de trazo grueso y totalmente infundadas contra el jefe del Estado ruso, pero dado que Yulia Navalnaya quedó viuda hace unos días, no haré comentarios”, dijo hoy el vocero del Kremlin, Dmitri Peskov.
Navalny, abogado y bloguero, se consolidó a lo largo de 12 años como el detractor número uno de Putin y de su “partido de ladrones y estafadores”, como solía describirlo.
Primero se dio a conocer ayudando a organizar grandes manifestaciones, en 2011 y 2012, que finalmente fueron reprimidas, y en 2013 quedó segundo en las elecciones municipales de Moscú, un logro que impulsó su visibilidad.
Acosado por las autoridades e ignorado por los medios de comunicación oficiales, construyó una notoriedad en Internet y en las redes, gracias a la difusión de investigaciones en video virales que denunciaban la corrupción del poder ruso.
En enero de 2021 fue detenido al regresar a su país tras recuperarse en Alemania, donde fue hospitalizado tras ser víctima de un envenenamiento en Rusia que atribuyó a Putin, algo que el Kremlin negó.