El Departamento del Tesoro de Estados Unidos anunció este jueves el enésimo paquete de sanciones contra personalidades y empresas cercanas al Kremlin y al presidente ruso, Vladimir Putin, en respuesta a la invasión de Ucrania. Entre los sancionados, figura el oligarca Vladimir Potanin.
El Tesoro sancionó a Potanin, “uno de los hombres más ricos de Rusia”. También “a otras cuarenta personas, entre ellas funcionarios del Kremlin, como el primer viceprimer ministro, Andrei Belousov, y los viceprimer ministros Dimitro Chernishenko, Sergei Franko, Oleg Belozherov y Oleksi Sazanov”.
Asimismo, la Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC) puso en su ‘lista negra’ a otras 18 entidades relacionadas con los servicios financieros rusos, en un intento por “aislar” a Moscú de los mercados globales, de acuerdo con el subsecretario del Tesoro, Brian Nelson.
“Las designaciones de hoy por parte de Estados Unidos, junto con las acciones tomadas por nuestros socios internacionales, inhibirán aún más la capacidad del régimen de Putin para financiar su horrible guerra contra Ucrania”, subrayó.
Estados Unidos anunció más sanciones a oligarcas rusos y funcionarios del Kremlin
Washington confía en que estas nuevas restricciones golpeen la economía rusa lo que resta de año y la contraiga aún más en 2023. “Más allá de eso, la pérdida de inversión, los controles a las exportaciones y las limitaciones en su economía inhibirán sus perspectivas de crecimiento los próximos años”, explicó el Departamento del Tesoro en un comunicado.
Entre las posesiones de Potanin que están sujetas a estas nuevas sanciones está Rosbank, banco comercial con sede en Rusia que el oligarca adquirió a principios de este año y que ya fue objetivo de las autoridades británicas y canadienses ya que se trata de “una institución de crédito en exceso importante” para el Kremlin.
En la lista, también se encuentra su compañía, Interros, así como su esposa Ekaterina Viktoronovna Potanina y sus dos hijos, Ivan Vladimirovich Potanin y Anastasia Vladimirovna Potanina. Asimismo, la Administración Biden bloqueó su yate Nirvana, “valorado en cientos de millones de dólares”.
