Mientras el fuego cruzado entre Israel y Hamas mantiene su intensidad en niveles infernales, a 13 días de la incursión fatídica de milicianos yihadistas al territorio israelí y de la represalia despiadada que provocó el agravio letal, el foco de atención internacional está puesto sobre dos asuntos candentes del conflicto que mantiene en vilo a buena parte del mundo.
Uno de ellos tiene relación con la inminente ofensiva de las Fuerzas de Defensa de Israel a la Franja de Gaza con el propósito de aniquilar a los combatientes del Movimiento de Resistencia Islámica atrincherados en ese enclave palestino.
El otro tema es el inicio postergado de la entrada de ayuda humanitaria a los 2,3 millones de personas confinadas por imperio de las circunstancias en el sector sur de Gaza, de los cuales en estos momentos el 60% vive a la intemperie, sin acceso al agua ni atención sanitaria, según informó este jueves Guillemette Thomas, coordinador de Médicos Sin Fronteras (MSF) para los Territorios Palestinos Ocupados. El voluntario de la organización internacional humanitaria advirtió que “sin electricidad, muchos pacientes morirán”. En declaraciones al diario británico The Guardian, Thomas arriesgó que “la crisis sanitaria está al borde de la explosión”.
Listos para entrar
Respecto a la ofensiva terrestre israelí, el ministro de Defensa de Israel dijo este jueves a las tropas acantonadas en la frontera con Gaza que estuvieran listas para entrar en territorio gazatí, aunque sin precisar cuándo se concretaría la operación militar.
En una reunión con soldados de infantería israelíes, Yoav Gallant instó a las fuerzas a “organizarse y estar listas” para recibir de un momento a otro una orden de entrada.
“Quien vea Gaza desde lejos, ahora la verá desde dentro”, arengó. “Se los prometo”, remató su proclama.
Israel ha concentrado miles de soldados en el linde sur tras el ataque lanzado por Hamas el 7 de octubre que desató la quinta guerra entre ambos bandos.
Inseguridad en todas partes
En tanto, los ataques aéreos israelíes golpearon este jueves lugares en toda la Franja de Gaza, incluidas partes del sur que Israel había declarado zonas seguras, aumentando los temores entre más de dos millones de palestinos atrapados en el territorio dada la sensación de que no hay lugar fiable en esa lonja de tierra de 41 kilómetros de largo y entre 6 y 12 kilómetros de ancho y de tan sólo 360 kilómetros cuadrados de superficie.
Por su parte, el comandante del mando sur del Ejército israelí, Yaron Finkelman, pronosticó que la inminente ofensiva terrestre será “difícil, larga e intensa”.
“Esta guerra se nos impuso y combatimos contra un cruel enemigo que nos ha dañado enormemente, pero debemos pararlos: estamos golpeándoles duramente”, explicó a los reservistas desde un cuartel en la frontera con Gaza, según publicó el diario The Times of Israel.
A todo esto, el gabinete de guerra liderado por el primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, se reunió el miércoles en la base militar de Kirya para detallar los últimos preparativos de la ofensiva, cuyo objetivo es debilitar de forma significativa las capacidades de Hamas. Los estrategas políticos y militares israelíes advirtieron a Joe Biden, antes de que el presidente estadounidense abandonara Israel tras su viaje oficial relámpago, que la operación terrestre en la Franja de Gaza es “inevitable”.
Esperando la ayuda
En tanto, crece la angustia de los palestinos confinados en Gaza mientras aguardan la llegada de camiones con agua, comida y medicamentos desde Egipto.
La situación en el enclave incandescente es crítica, con hospitales saturados, más de 3.700 muertos y casi 12.500 heridos por los bombardeos incesantes perpetrados por Israel en respuesta a los ataques yihadistas, según fuentes del Ministerio de Salud local.
Al respecto, el director general de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Tedros Adhanom Ghebreyesus, expresó su esperanza en que este + puedan entrar en Gaza camiones con ayuda humanitaria de la organización, si se cumplen las promesas de Egipto e Israel y finalmente queda abierto el paso de Rafah.
Por su parte, el secretario general de Naciones Unidas, António Guterres, pidió este jueves desde El Cairo a las partes en conflicto un “alto el fuego inmediato” para evitar más sufrimiento humano y asegurar la entrega de ayuda humanitaria a la Franja de Gaza. “Necesitamos comida, agua, medicinas y combustible ahora mismo”, aseguró el alto comisionado, agregando que esta ayuda humanitaria tiene que ser “sostenible en el tiempo” y distribuida a todas las zonas en Gaza “de forma segura”. También hizo un llamamiento a Hamas para la liberación “incondicional e inmediata” de los rehenes israelíes retenidos en la Franja de Gaza, mientras exhortó a Israel que facilite la entrada de ayuda humanitaria.
