Un grupo de hombres armados irrumpió en un bar de Villahermosa, Tabasco, y abrió fuego contra los asistentes, dejando un saldo de seis jóvenes muertos y cinco personas heridas. El ataque ocurrió este domingo en el centro nocturno “DBar”, en México, y conmocionó a la comunidad.
El secretario de Seguridad Pública, Omar García Harfuch, informó a través de la red social X (antes Twitter) que las autoridades federales están colaborando con las locales para esclarecer el crimen. Sin embargo, hasta el momento no se realizó detenciones y se desconoce el motivo del ataque.
Los videos que circulan en redes sociales muestran escenas de pánico, con personas huyendo del lugar mientras otros sobrevivientes intentaban ayudar a las víctimas a la espera de asistencia médica.
Contexto de Tabasco
Este tiroteo se suma a una ola creciente de violencia en el estado de Tabasco. En lo que va del año, el número de asesinatos en la entidad aumentó considerablemente, con un total de 715 homicidios registrados entre enero y octubre de 2024, frente a los 253 del mismo período en 2023, según estadísticas oficiales.
El ataque se produce en un contexto de creciente inseguridad en la región, que vio recientemente una serie de incidentes violentos. El 20 de noviembre, por ejemplo, un grupo armado atacó a policías locales durante un patrullaje en Villahermosa.
Este hecho no es aislado. A principios de noviembre, otro ataque armado en un bar de Querétaro dejó 10 muertos y 13 heridos, reflejando un aumento de la violencia que también alcanzó a estados que previamente se consideraban más seguros, como Querétaro, que hasta hace poco se mantenía alejado de la violencia generalizada que afecta otras regiones del país.
La masacre en Tabasco es un trágico recordatorio de la creciente violencia en diversas partes de México, un país que continúa luchando contra el crimen organizado y los cárteles de drogas que operan con impunidad en varias zonas del país. Las autoridades siguen investigando el caso, pero la falta de información sobre los responsables y el móvil del ataque deja en suspenso la esperanza de justicia para las víctimas y sus familias.