Un cese al fuegooy
entre Israel y Hezbollah que comenzó este miércoles parecía mantenerse, mientras residentes en autos repletos de pertenencias regresaban hacia el sur del Líbano a pesar de las advertencias de las tropas israelíes y libanesas de que se mantengan alejados de ciertas áreas.
Si se mantiene, la tregua pondría fin a casi 14 meses de combates entre Israel y el grupo yihadista libanés, que se intensificaron a mediados de septiembre hasta convertirse en una guerra total y amenazaron con arrastrar al patrocinador de Hezbollah, Irán, y al aliado más cercano de Israel, Estados Unidos, a una conflagración más amplia.
El acuerdo no contempla la guerra en Gaza, donde los ataques israelíes en la madrugada de este miércoles contra dos escuelas convertidas en refugios improvisados en la ciudad de Gaza mataron a 11 personas, incluidos cuatro niños, según funcionarios del hospital. Israel dijo que uno de los ataques tuvo como objetivo a un francotirador de Hamas y el otro a militantes que se escondían entre los civiles.
La tregua en Líbano podría dar un respiro a los 1,2 millones de libaneses desplazados por los combates y a las decenas de miles de israelíes que huyeron de sus hogares a lo largo de la frontera.
“Fueron 60 días desagradables y feos”, dijo Mohammed Kaafarani, de 59 años, desplazado de la aldea libanesa de Bidias. “Llegamos a un punto en el que no había lugar donde esconderse”.
Condiciones necesarias
El acuerdo negociado por Estados Unidos y Francia, aprobado por Israel el martes por la noche, exige un cese inicial de dos meses de los combates y requiere que Hezbollah ponga fin a su presencia armada en el sur del Líbano, mientras que las tropas israelíes deben regresar a su lado de la frontera.
Miles de soldados libaneses adicionales y fuerzas de paz de la ONU se desplegarían en el sur, y un panel internacional encabezado por Estados Unidos supervisaría el cumplimiento.
Israel dice que se reserva el derecho de atacar a Hezbollah en caso de que viole los términos del acuerdo. La oficina del primer ministro Benjamin Netanyahu dijo que las tropas arrestaron a cuatro agentes de la organización libanesa, incluido un comandante local, que habían ingresado a lo que se refirió como un área restringida. Dijo que se ha ordenado a las tropas que impidan que la gente regrese a las aldeas cercanas a la frontera.
A todo esto, Israel sigue luchando contra los militantes de Hamas en Gaza en respuesta a la incursión transfronteriza del grupo en el sur de Israel en octubre de 2023. Pero el presidente Joe Biden dijo esta semana que su administración haría otro esfuerzo en los próximos días para tratar de renovar las acciones para un acuerdo en el enclave palestino devastado por la guerra.
De regreso a casa
Horas después de que entrara en vigor el alto el fuego, miles de personas se dirigieron hacia el sur desde Beirut con sus pertenencias y colchones atados encima de sus coches. El tráfico estaba bloqueado en la entrada norte de la ciudad portuaria de Sidón.
“Este es un momento de victoria, orgullo y honor para nosotros, la secta chiita, y para todo el Líbano”, dijo Hussein Sweidan, un residente que regresaba a la ciudad portuaria de Tiro. Dijo que veía el alto el fuego como una victoria para Hezbollah. El grupo militante chií a menudo ha enfrentado críticas de miembros de otras comunidades religiosas del Líbano.
Se escucharon disparos esporádicos de celebración en una de las principales rotondas de la ciudad, mientras los conductores tocaban sus bocinas y los residentes vitoreaban.
El ejército israelí advirtió a los libaneses desplazados que no regresaran a las aldeas evacuadas en el sur del Líbano, donde las tropas israelíes seguían presentes tras la invasión terrestre a principios de octubre. El ejército israelí dijo que las fuerzas abrieron fuego para hacer retroceder a varios vehículos que ingresaban a un área restringida.
En Israel, el ambiente era mucho más moderado, con los israelíes desplazados preocupados de que el acuerdo no fuera lo suficientemente lejos como para frenar a Hezbollah y que no abordara Gaza y los rehenes que aún se encuentran allí.
Más de 3.760 personas han muerto por fuego israelí en Líbano desde el inicio del conflicto, muchas de ellas civiles, según funcionarios de salud libaneses.
