Pese a que la mayoría cumple funciones meramente ceremoniales, las noticias sobre las casas reales en el mundo siguen teniendo un impacto desproporcionado.
La decisión de abandonar el país del rey emérito de España Juan Carlos I ocupa absolutamente todas las portadas de los diarios ibéricos (y de buena parte del mundo también).
El argumento que utilizó el rey emérito, de 82 años, fue que “la repercusión pública” de las noticias sobre sus cuentas en paraísos fiscales le quitarán tranquilidad al Palacio de la Zarzuela.
La revelación de que la examante del rey emérito, Corinna Larsen, declaró ante la Justicia de Suiza que don Juan Carlos le donó 71 millones de dólares, que supuestamente le había regalado el rey de Arabia Abdullah bin Abdulaziz, determinó la decisión del rey emérito de abandonar el país.
Uno de los escándalos que precedió a la aparición de la empresaria alemana fue cuando se filtró que el rey se rompió la cadera cazando elefantes en Botswana, África, en 2012. Larsen trabajaba para una empresa que organizaba safaris.
Entre otros escándalos protagonizados por Juan Carlos I, en 2008 habría recibido 100 millones de euros que fueron depositados en una cuenta en Suiza de la fundación Lucum, con sede en Panamá, a cambio de un descuento de la empresa española que ganó la licitación para la construcción del tren de alta velocidad entre Medina y La Meca, en Arabia.
En 2014, se anunció la abdicación al trono de Juan Carlos I y la sucesión quedó en manos del actual monarca de España Felipe IV.
Mientras su esposa Sofía permanece en España, el monarca emérito, quien no perderá el título honorífico de rey, ya se instaló en un lujoso complejo hotelero de República Dominicana.
No han sido los únicos escándalos de la monarquía española. Iñaki Urdangarin, marido de la infanta Cristina, fue condenado en 2017 a seis años de prisión por fraude a la administración pública, tráfico de influencias y falsificación de documento público, entre otros delitos.
Inglaterra
El príncipe Andrés, tercer hijo y segundo varón de la reina Isabel II del Reino Unido, es el foco de las noticias sobre la monarquía británica desde que se dio a conocer su implicancia en el caso Jeffrey Epstein, el magnate estadounidense que se suicidó en prisión tras desvelarse que era la cabeza de una gigantesca red de pedofilia.
Cada día aparecen nuevas víctimas y detalles de la participación del príncipe Andrés, quien fue acusado de abuso.
A pesar de negar su vinculación, el duque de York fue sepultado por la declaración de Virginia Roberts Giuffre (35), quien lo acusa de haber mantenido sexo cuando ella tenía 17 años.
Aunque con otro tenor, otro acontecimiento perturbó este año la tranquilidad de la reina de Inglaterra. Se trata de la decisión del príncipe Harry y su esposa Meghan de abandonar la realeza y afincarse en Canadá.
Distanciado de su hermano William, el hijo más pequeño del príncipe Carlos y de Diana de Gales anunció que su idea era “trabajar para ser financieramente independiente”.
Arabia Saudita
El asesinato del periodista Jamal Khashoggi, muy crítico del régimen saudita, es una mancha sobre esta monarquía. El príncipe heredero del trono, Mohammed bin Salman (su padre el rey Salman padece Alzheimer), de 34 años, aparece implicado en el crimen, pues los 15 miembros del escuadrón saudita que torturó y desmembró a Khashoggi en Estambul, tienen estrecha relación con él.
A todo esto, Estados Unidos decidió sancionar a 17 personas sauditas por el asesinato, incluido el exasesor de bin Salman, Saud Al-Qahtani, pero no al príncipe heredero.
Máxima Zorreguieta
Reina consorte de los Países Bajos desde 2013, la argentina Máxima Zorreguieta suele representar al país de su marido, el rey Guillermo Alejandro.
Máxima fue noticia cuando su padre, Jorge Zorreguieta, quien tuvo un alto cargo durante la última dictadura argentina, no fue invitado a la boda real. En 2018, su hermana Inés, de 33 años, fue encontrada sin vida en su casa de Buenos Aires.
Lorenzo de Bélgica
El hermano menor del rey Felipe de los Belgas es uno de los tantos díscolos de familias reales. Conocido por su carácter irascible y arrogante, solía pasearse por los restaurantes sin pagar y ostentando su linaje real. También fue acusado de desviar fondos públicos.
Ernesto Augusto de Hannover
El esposo de Carolina de Mónaco desde 1999 es noticia en los medios europeos por sus continuos ataques de ira contra periodistas y paparazzi. Los problemas con el alcohol le pasaron factura y en 2018 ingresó en una clínica de desintoxicación por su adicción. Meses atrás le detectaron un tumor maligno en el cuello.
