Al menos cinco palestinos murieron este domingo en ataques ejecutados por el Ejército israelí contra columnas de desplazados que intentaban regresar a sus hogares en el norte de la Franja de Gaza, que tuvieron que abandonar a causa de la ofensiva lanzada por Israel en respuesta a los ataques ejecutados el 7 de octubre por el Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás).
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Según las informaciones recogidas por el diario palestino ‘Filastin’, vinculado al grupo islamista palestino, al menos cinco cadáveres fueron trasladados al Hospotal Al Auda, en el campamento de refugiados de Nuseirat (centro) tras los ataques por parte de Israel.
Fuentes locales citadas por la agencia palestina de noticias WAFA confirmaron el balance de víctimas y afirmaron que el Ejército de Israel realizó disparos con armas cortas y artillería, además de lanzar gases lacrimógenos contra los grupos de desplazados que intentaban avanzar por la calle Al Rashid.
Asimismo, recalcaron que sólo unas pocas personas lograron cruzar hacia el norte del enclave, sin que las autoridades de Israel se hayan pronunciado por ahora sobre estos incidentes. Horas antes, el Ejército había recalcado que el retorno al norte de Gaza está terminantemente prohibido porque sigue siendo “zona de combate”.
La agencia palestina Maan informó de una “ola inversa de desplazamiento” que comenzó poco después de la medianoche, coincidiendo aproximadamente con el ataque directo lanzado por Irán contra territorio israelí, cuando cientos de personas se aproximaron al puente de Gaza para iniciar su trayecto, bien a la ciudad de Gaza, bien más al norte del enclave.
Cabe recordar que cientos de miles de palestinos viven hacinados ahora mismo en la ciudad de Rafá, en el sur de Gaza, tras acabar desplazados por la fuerza de sus hogares por la operación israelí contra Hamás en el centro y sur del enclave. En medio de una catastrófica situación humanitaria, la población desplazada vive bajo la amenaza de una posible operación israelí a gran escala en la ciudad.
Testigos citados por Maan dijeron que militares israelíes estaban asegurando a los participantes en la marcha que todas las mujeres, niños menores de 14 años y hombres de más de 50 años podrían regresar libremente a sus hogares en el norte de Gaza, pero el Ejército israelí desmintió categóricamente esas informaciones y aseguró que no ha dado esa clase de permiso en absoluto.
“El Ejército israelí no permitirá el retorno de los residentes del norte de Gaza, ni desde el eje de la carretera de Saladino ni por la carretera costera de Rashid”, hicieron saber en un comunicado. “El norte de la Franja de Gaza es una zona de conflicto y su retorno allí es imposible”, dijeron.
