Una escaladora iraní salió de Corea del Sur el martes tras competir en una prueba en la que escaló sin el pañuelo obligatorio en su país para cubrir el cabello, según las autoridades. Medios en farsi fuera de Irán advirtieron de que las autoridades iraníes podrían haberla obligada a marcharse antes de tiempo y que podría ser arrestada en su país, algo que Teherán se apresuró a negar.
Elnaz Rekabi, medallista múltiple en varias competiciones, escaló sin hiyab en medio de las protestas iniciadas por la muerte el 16 de septiembre de una mujer de 22 años. La policía iraní de la moral había detenido a Mahsa Amini por su vestimenta.
El reclamo de las mujeres en Irán
Las manifestaciones, que han movilizado a niños, trabajadores petroleros y otras personas en más de 100 ciudades, suponen el mayor desafío a la teocracia iraní desde las marchas masivas registradas tras las disputadas elecciones presidenciales de 2009.
Más tarde, una publicación en la cuenta de Instagram atribuida a Rekabi indicó que no llevar el hiyab había sido algo “no intencionado’', aunque en un primer momento no estaba claro si ella había escrito el texto o en qué estado se encontraba en ese momento. El gobierno iraní suele presionar a los activistas dentro y fuera del país y a menudo exhibe lo que grupos de derechos describen como confesiones coaccionadas en la televisora estatal.
Rekabi se marchó de Seúl el martes en un vuelo por la mañana, según señaló la embajada iraní en Corea del Sur. El Servicio en farsi de la BBC, que tiene extensos contactos en Irán pese a tener prohibido operar en el país, citó a una “fuente informada’' no identificada y que dijo que las autoridades iraníes habían confiscado el celular y el pasaporte de Rekabi.
BBC Persian también dijo que en un principio la deportista tenía previsto regresar el miércoles, pero que su vuelo se había adelantado de forma inesperada.
IranWire, otro sitio web especializado en el país y fundado por el periodista iranícanadiense Maziar Bahari, que estuvo detenido en Irán, afirmó que Rekabi sería trasladada de inmediato a la conocida prisión de Evin en Teherán cuando llegara al país. Este fin de semana se produjo un enorme incendio en ese penal en el que murieron al menos ocho prisioneros.
La embajada iraní en Seúl negó en un tuit “todas las noticias falsas y desinformación’' sobre la marcha de Rekabi el martes. Pero lugar de mostrar una foto de ella en la competencia en Seúl compartió una foto en la que salía con hiyab en otro torneo Moscú, donde ganó una medalla de bronce.
La embajada iraní en Seúl no respondió a llamadas el martes.
Rekabi no se puso hiyab durante la final del domingo del Campeonato de Asia de la Federación de Escalada Deportiva, según la Federación Alpina de Corea, con sede en Seúl y que organizó el evento.
Miembros de la federación dijeron que Rekabi había llevado el pañuelo en sus primeras apariciones en el evento de una semana. El domingo sólo llevó una cinta negra para competir, con el cabello negro en una cola de caballo. Vestía una camiseta blanca con la bandera iraní.
La publicación aparecida más tarde en Instagram, escrita en primera persona, incluía una disculpa en nombre de Rekabi. El texto decía que la habían llamado de improviso para competir, aunque en videos del evento en Seúl aparecía relajada al acercarse a la pared y después de competir. Añadió que regresaba a Irán el martes como tenía previsto.
Rekabi formaba parte de una delegación iraní de 11 miembros, que incluía ocho deportistas y tres entrenadores, según la federación.
Miembros de la federación dijeron en un principio que no eran conscientes de que Rekabi hubiera competido sin hiyab, pero lo investigaron tras recibir preguntas al respecto. El evento no tiene normas que requieran pañuelos a las deportistas, indicaron. Sin embargo, las mujeres iraníes que compiten en el extranjero con bandera iraní siempre llevan hiyab.
“Entendemos que está de regreso a Irán y seguiremos monitoreando la situación según evolucione a su llegada’', indicó en un comunicado la Federación Internacional de Escalada, que supervisa el evento. “Es importante recalcar que la seguridad de los deportistas es primordial para nosotros y que respaldamos cualquier esfuerzo de mantener a salvo a un miembro apreciado de nuestra comunidad en esta situación’'.
La federación dijo que había estado en contacto con Rekabi y con funcionarios iraníes, sin dar más detalles.
El Ministerio surcoreano de Justicia rechazó confirmar si la deportista seguía en el país, debido a normas de privacidad. El Ministerio surcoreano de Exteriores dijo que no tenía comentarios sobre el tema.
Rekabi, de 33 años, ha llegado al podio en tres ocasiones en el Campeonato de Asia, con una plata y dos bronces.
Por ahora, grupos de derechos humanos estiman que más de 200 personas han muerto en las protestas y en la violenta represión posterior. Irán lleva semanas sin dar cifras. Se han visto manifestaciones en más de 100 ciudades, según el grupo Activistas de Derechos Humanos en Irán. Se cree que miles de personas han sido detenidas.
Sin embargo, reunir información sobre las marchas sigue siendo difícil. El gobierno iraní ha restringido las conexiones a internet durante las últimas semanas y al menos 40 reporteros han sido detenidos, según el Comité para Proteger a los Periodistas.
Funcionarios iraníes como el líder supremo, el ayatolá Alí Jamenei, han atribuido las manifestaciones a la labor de enemigos externos del país, y no a iraníes indignados por la muerte de Amini y otros problemas en el país.
Los iraníes han visto cómo sus ahorros se evaporaban por el desplome de la moneda del país, el rial, tras el derrumbe del acuerdo nuclear de Teherán con potencias internacionales.
La oficina del alto comisionado de Naciones Unidas para los derechos humanos pidió el martes la inmediata liberación de todos los “detenidos de forma arbitraria’' en las protestas. También criticó la “incesante respuesta violenta de las fuerzas de seguridad’', que según medios ha dejado menores muertos y detenidos.
“El empleo innecesario y desproporcionado uso continuado de la fuerza contra los manifestantes debe detenerse’', afirmó el comunicado. “Detener a gente sólo por ejercer su derecho a la asamblea pacífica y la libertad de expresión supone una privación arbitraria de libertad’'.