El presidente francés, Emmanuel Macron, nombró este martes al actual titular de Defensa, Sébastien Lecornu, como su nuevo primer ministro.
Su nombramiento subraya su trayectoria ininterrumpida y su rol como una de las pocas figuras constantes en el inestable panorama político francés desde la llegada de Macron a la presidencia en 2017. Su ascenso a la cima del Gobierno culmina una carrera política extraordinaria, caracterizada por una precocidad notable y una dedicación constante a diferentes carteras ministeriales.
Nacido en la región noroccidental de Normandía y nieto de un miembro de la resistencia francesa, Lecornu consideró inicialmente una carrera militar en la escuela de Saint Cyr, pero optó por la política a una edad muy temprana.
Su incursión en el ámbito público fue meteórica: con solo 19 años, ya se desempeñaba como asistente parlamentario. Para 2008, ocupaba el cargo de consejero de un ministro y, siete años después, en 2015, presidía un departamento. Su llegada al Gobierno ocurrió a la temprana edad de 31 años, marcando un hito en su rápida y constante progresión. Sus primeros pasos en la política fueron en las filas del tradicional partido de derecha de figuras como Jacques Chirac y Nicolas Sarkozy.
Lecornu, un pilar de continuidad en el Gobierno de Macron
Desde su aterrizaje en el gobierno, Lecornu demostró ser una figura resiliente y adaptable, manteniendo su presencia en diversas carteras a lo largo de los años. Gestionó ministerios clave como Transición Ecológica, Territorios, Ultramar y, más recientemente y durante más de tres años, la cartera de Defensa.
Esta notable permanencia lo convierte en uno de los pocos rostros de continuidad en el gobierno de Macron, a pesar de los múltiples cambios ministeriales y la inestabilidad política que caracterizó el período. Bajo su dirección, sirvió bajo el mando de hasta seis primeros ministros diferentes, lo que evidencia su capacidad para adaptarse y su valía para la administración.
La lealtad de Lecornu hacia Macron se manifestó en momentos cruciales. Como exalcalde de Vernon, ganó la confianza del presidente al organizar el “Gran Debate” entre 2018 y 2019, una serie de discusiones con políticos locales diseñada para desactivar las masivas protestas sociales de los “chalecos amarillos”.
Más recientemente, como titular de Defensa, su gestión estuvo profundamente marcada por la invasión rusa de Ucrania. A pesar de su habitual discreción en los medios, Lecornu se destacó al implementar una política de “rearme” ordenada por el jefe de Estado, demostrando su capacidad de liderazgo en un contexto de guerra y tensiones internacionales.
Lecornu es descrito como un aliado leal y discreto de Macron. Además de su carrera política, es un reservista de la Gendarmería y un apasionado de la Historia. Su perfil combina una profunda comprensión del servicio público con una habilidad demostrada para navegar por los complejos desafíos políticos y sociales de Francia, consolidándose como una figura central en la visión de futuro del presidente Macron.
Macrón designó a un nuevo primer ministro: lo que se sabe
La designación se produce en un contexto de crisis política, un día antes de una jornada de protestas que amenaza con paralizar el país. Macron, que rechazó convocar a nuevas elecciones, busca estabilidad con este nombramiento.
Lecornu, de 39 años, reemplaza a François Bayrou, quien presentó su renuncia este mismo martes tras haber permanecido apenas nueve meses en el cargo y después de perder una votación de confianza en la Asamblea Nacional el lunes.
La cercanía de Lecornu con el presidente Macron habría sido una de las claves para su promoción, con el presidente deseando nombrarlo en Matignon (sede de la jefatura del Gobierno) desde diciembre pasado. En la contienda por el puesto, Lecornu superó al primer secretario del Partido Socialista, Olivier Faure, quien también se había ofrecido para ocupar el cargo.
Desde el Elíseo, se informó que Macron solicitó a Lecornu que “consulte a las fuerzas políticas representadas en el Parlamento con el fin de adoptar un presupuesto para la nación y lograr los acuerdos esenciales para las decisiones de los próximos meses”.
La designación de Lecornu se produce en la víspera de una masiva jornada de protesta nacional que promete detener el país. Para este miércoles, Francia desplegará 80.000 policías y gendarmes con instrucciones de actuar con firmeza frente a los activistas del movimiento ‘Bloqueemos todo’. Este grupo busca paralizar los transportes y otros servicios en una protesta que evoca la insurgencia de los ‘chalecos amarillos’ de 2018.