Forever 21, una de las marcas de moda más populares de Estados Unidos, se encuentra en una situación crítica que podría llevarla al cierre de 200 tiendas. Esta medida drástica es una clara señal de la crisis financiera que enfrenta la compañía, marcando posiblemente el fin de una era en la moda rápida.
En su apogeo, la empresa operó más de 800 tiendas a nivel mundial, consolidándose como una marca líder entre los jóvenes gracias a su oferta de ropa, calzado y accesorios a precios accesibles. Sin embargo, la crisis del sector minorista, el auge del comercio electrónico y los cambios en los hábitos de consumo han impactado negativamente sus ventas.
Según Bloomberg, Forever 21 planea cerrar aproximadamente un tercio de sus tiendas en Estados Unidos, lo que equivale a cerca de 200 sucursales de las 350 que actualmente mantiene en el país. Entre las tiendas afectadas se encuentran ubicaciones emblemáticas en Nueva York y el Mall of America. La compañía está explorando opciones para mantenerse a flote, incluyendo la búsqueda de un comprador y estrategias de optimización de costos.
La cadena ya se había declarado en bancarrota en 2019, de acuerdo al Capítulo 11 de la Ley de Quiebras de EE. UU., lo que le permitió cerrar tiendas y reestructurar sus deudas. Sin embargo, la crisis económica provocada por la pandemia y la competencia con marcas online como Shein y Fashion Nova complicaron aún más su situación.
Mientras los consumidores priorizan las plataformas de comercio electrónico, la cadena continuó dependiendo principalmente de sus tiendas físicas. Esta estrategia la dejó rezagada frente a competidores que optimizaron sus cadenas logísticas para satisfacer las nuevas demandas del mercado.
Actualmente, es propiedad de Authentic Brands Group, quien adquirió la marca en 2020 tras su primer proceso de bancarrota. Authentic Brands está considerando otorgar licencias de la marca a terceros, permitiendo que otros distribuidores y operadores se encarguen de la gestión directa de las tiendas.
Catalyst Brands, la empresa operadora de Forever 21 en Estados Unidos, declaró que “sigue explorando opciones estratégicas, incluida una posible venta, y al mismo tiempo está reduciendo los costos y optimizando la presencia de sus locales de venta al público”. Sin embargo, la empresa no confirmó el inicio de un nuevo proceso de quiebra.
El futuro de Forever 21 es incierto. Si no logra acuerdos con inversores o distribuidores en los próximos meses, existe la posibilidad de que cierre sus operaciones de manera definitiva.
