La empresa cordobesa Peñón del Águila nació en 2007 con un parque temático de aventura para atraer al turismo a La Cumbrecita. Con el tiempo, la pyme familiar comenzó a indagar en otras unidades de negocio y fue así que llegó a la cerveza artesanal.
En un principio, la idea era crear su propia cerveza para ofrecer en el parque turístico, pero el negocio escaló de tal manera que desde 2013 tienen su propia planta de producción en Malagueño.
En la actualidad, ofrece alrededor de 12 estilos de cerveza fija en lata y más de 14 opciones de cerveza tirada. Se consolidó a nivel nacional bajo el formato de 22 franquicias comerciales y con la incorporación de nuevos productos a su línea industrial.
Tras afianzar su presencia en el país con sus locales gastronómicos y la comercialización de sus latas en vinotecas y en supermercados, en el año 2021 comenzaron a exportar cerveza a Chile y a Uruguay.
El gusto por los destilados
En el mismo año, inició su camino por los destilados y las bebidas blancas con la creación de su gin Maleficio. Esta nueva unidad de negocio, denominada “Peñón Destilería”, se concentra en cuatro variedades de gin en botellas de medio litro y en latas de gin tonic listo para tomar.
El producto ya se consume a nivel nacional y busca posicionarse en el exterior. Con esta intención, enviaron a Japón cuatro mil botellas de gin bajo la marca Maleficio, lo que significó el primer paso de la pyme en el mercado asiático.
Se trata del resultado de un trabajo colaborativo con la Agencia ProCórdoba, dependiente del Ministerio de Industria, Comercio y Minería.
“A fines de 2022, llegamos a Japón, donde está creciendo mucho el consumo de productos premium, sobre todo en destilados y en bebidas blancas como el gin”, cuenta Marcelo Roggio, director ejecutivo de la cervecera.
La exportación alcanzó las cuatro variedades de la bebida: Dry, un destilado de nueve botánicos; Honey, un macerado con miel; Orange, macerado con cáscara de naranja, y Pink, de frutos rojos e hibiscus.
“Se trata de una categoría que viene avanzando de manera sostenida desde 2019. Se va metiendo cada vez más el hábito de consumo del gin y el gin tonic”, agrega Roggio.
El producto representa el 25% de la facturación de la empresa y se consume en sus franquicias tanto en forma de lata como “gin tirado”. También se ofrece en vinotecas y en la tienda online que posee la firma.
Roggio cuenta que la firma participa de manera activa en eventos internacionales para conquistar nuevos mercados. “Estuvimos presentes en la feria Apas de San Pablo, en Brasil, y a mediados de septiembre visitamos Drinktec, en Alemania, una de las ferias más importantes del sector bebidas”, afirma.
Nuevos horizontes
De acuerdo con lo comentado por el emprendedor, la pequeña empresa busca ampliar la cartera de productos ofrecidos en el país asiático, así como también conquistar nuevos mercados de la zona. En este caso, se encuentra en tratativas con China para exportar su línea de cervezas frutales.
En cuanto a Latinoamérica, trata de avanzar en la exportación del gin a Brasil, Perú, Bolivia y Paraguay, además de los países que tienen consolidado el negocio cervecero, que son Chile y Uruguay. Con esto pretende que, en los próximos años, las exportaciones representen el 15% de la facturación total.
Otro los planes de la empresa para 2023 es el lanzamiento de productos vinculados a la modalidad ready to drink (listos para tomar) y al consumo responsable. “El año pasamos lanzamos nuestra primer cerveza sin alcohol, y los nuevos van a ir en esa línea; y sin conservantes ni aditivos”, adelanta el empresario.
