- Un informe del Ieral de Fundación Mediterránea analiza esta carga tributaria en relación al año pasado y en comparación también con 2015.
- Tres escenarios para hacer los cálculos: con suba salarial del 36%
- 39% o 42%.
En plena campaña para poder llegar a ser presidente, Mauricio Macri lanzó una de las promesas incumplidas que muchos argentinos exhiben hoy como señal de descontento sobre su gestión: "En mi gobierno, los trabajadores no van a pagar Impuesto a las Ganancias".
Un informe del Instituto de Estudios de la Realidad Argentina y Latinoamericana (Ieral) de la Fundación Mediterránea, con información provista por la Jefatura de Gabinete al Congreso de la Nación, indica que la cantidad de asalariados alcanzados por este tributo aumentó 52 por ciento entre 2015, último año de gobierno de Cristina Fernández, y 2018.
En total, significa que 745 mil ciudadanos más comenzaron a pagar Ganancias, de acuerdo con estos datos oficiales.
De todos modos, un aspecto que puede esgrimir Cambiemos a su favor es que el peso de este impuesto sobre los sueldos de quienes lo pagan se redujo en este mismo lapso de tiempo.
Evolución
“El impuesto a las ganancias sobre asalariados aumenta su carga en 2019 respecto de 2018, aunque se ubica por debajo del peso que tenía en 2015”, resume el reporte elaborado por los investigadores Marcelo Capello y Vanessa Toselli, del Ieral.
Esta perspectiva coincide con la que reflejó a fines de mayo el Instituto Argentino de Análisis Fiscal (Iaraf).
Los economistas tomaron como base sueldos a valores constantes de 2016 y compararon como evolución la presión sobre el salario –tanto bruto como neto– para trabajadores con y sin cargas de familia.

Para 2019, asumieron tres escenarios en función de tres probables aumentos salariales: de 36 por ciento, 39 por ciento y 42 por ciento.
Los cálculos dieron los siguientes resultados:
Trabajador soltero, sin hijos. Para el Ieral, "el corte transversal muestra lo progresivo de este impuesto, ya que la carga sobre el salario bruto es este año de 0,4 por ciento para un salario que en 2018 fue de 33.020 pesos; de 4,5 por ciento para un sueldo que el año pasado fue de 49.530 pesos y de 23,5 por ciento para 132.080 pesos".

Trabajador casado, sin hijos. La carga tributaria del impuesto, sobre sus ingresos brutos, desciende dos puntos porcentuales respecto del asalariado sin cargas de familia. Sólo aquellos trabajadores con remuneraciones en 2018 de entre 33.020 y 41.275 pesos vieron incrementar la carga del impuesto entre 2015 y 2019. Para salarios equivalentes de 2016 correspondientes a 80 mil pesos (132.080 pesos en 2018), la reducción se ubica en torno a un punto porcentual. Los que ganaban 100 mil pesos en 2016 también ven reducida la carga impositiva actual frente a la de cuatro años atrás.

Trabajador casado, con hijos. Si en 2018 tenía ingresos por hasta 33.020 pesos, no hay diferencias en la presión tributaria: en ningún momento de los últimos cuatro años sufrió carga por Ganancias. Para ingresos por 82.550 pesos en 2018, hay cierta reducción: pasa de 14,2 por ciento en 2015 a 10,8 por ciento en 2019 (suponiendo la actualización salarial del 39 por ciento), aunque hay una leve suba respecto de 2018 cuando la incidencia fue de 9,7 por ciento.
