Sólo un año pasó desde la última realización del Cyber Monday, la efeméride con la que el comercio electrónico busca dar el último gran impulso al consumo antes de las Fiestas que cierran el calendario.
Un año en la Argentina puede equivaler a una década de cambios en economías con menos vértigo. Y precisamente la comparación entre el contexto en que se desarrolló aquella promo masiva de 2023 y la que llega este 4, 5 y 6 de noviembre da idea del viraje de 180° que transitamos.
“El 73% de los argentinos asegura que está adelantando compras para protegerse de la inflación”, señalaba en la previa del Cyber 2023 un sondeo de la consultora Trensity, describiendo una conducta que se aceleraba al ritmo del “plan platita”; de la incertidumbre electoral (la primera vuelta había sido en octubre y el balotaje llegaba el 19 de noviembre) y de la suba de la inflación. El IPC había marcado 12,7% en septiembre, el mes previo, más del triple de velocidad a la que los precios se mueven ahora: el índice de septiembre pasado fue del 3,5% y las estimaciones privadas anticipan que perforó el piso del 3% en octubre. Según EcoGo, la consultora de Marina Dal Poggetto, será del 2,8%, por citar un ejemplo.
Esa desaceleración es uno de los cambios de contexto más determinantes y se manifiesta en un rasgo que caracteriza a la promoción organizada por la Cámara Argentina de Comercio Electrónico (Cace) este año: la financiación sin interés.
La mayor parte de las mil empresas que participan esperan que las “cuotas sin interés” sean la estrella y el gran factor determinante en decisiones de compra.
Mientras la disparada de precios de 2023 obligaba a poner el foco en descuentos y acotaba la oferta de cuotas sin interés hasta las seis, salvo puntuales excepciones, este Cyber llega con la posibilidad de tarjetear todo a interés cero. Los planes a 18 meses abundan y se detectan casos como el de la tienda de Banco Nación, donde la compra de lavarropas, heladeras, televisores y otros bienes similares con eficiencia energética se puede estirar hasta los 30 meses sin pagar extra. El quíntuple de plazo en sólo un año.
El fenómeno se potencia por la feroz competencia desatada en el terreno de las finanzas digitales. Modo, la billetera que reúne a los 36 bancos más importantes, apuesta a seguir sumando usuarios en su cinchada con Mercado Pago. Ofrece reintegros del 20% en todas las tiendas oficiales del Cyber, y hasta 18 cuotas sin interés.
Cuotas y salarios en tensión
La explosión de cuotas se da en un contexto de crecimiento sostenido del crédito al sector privado, cuya participación en el balance de los bancos subió nueve puntos en los ocho primeros meses del año hasta llegar a 30,8% en agosto.
Por otra parte, el uso de tarjeta de crédito trepó un 7,58% interanual en el tercer trimestre del año, impulsado, destaca Payway en su último informe, “por los planes de financiación a más largos plazos”. El reporte muestra que los planes que más crecieron entre julio y septiembre respecto de 2023 fueron los de siete a 12 cuotas y los de 13 a 24 cuotas. Ambas alternativas más que duplicaron su participación en el abanico de financiación con plásticos, y hoy representan más del 30% del total.
Que el crédito tome la posta como motor central de la economía es una de las apuestas fuertes del Gobierno nacional. En septiembre, y a través de un posteo en la red social X, el ministro de Economía Luis Caputo le vaticinó una “explosión”.
Sin duda, que desde el sistema financiero se expanda el financiamiento a bajo costo al sector privado es una señal de buena salud para una economía. El Cyber Monday será un interesante testeo de hasta dónde esa herramienta alcanza para sacar al consumo de la Siberia en la que aún se encuentra.
Sucede que el poder de fuego de las “cuotas sin interés” tensiona con la gran erosión de ingresos que afecta a la población; ya que estar corto de dinero es, a la vez, un estímulo pero también un límite a la hora de usar la tarjeta.
Parte de los asalariados formales del sector privado lograron revertir el impacto de la inflación acumulada desde la devaluación de diciembre de 2023 a hoy, pero no reconstituir el fuerte deterioro previo. Además, ese contingente equivale a sólo un tercio del mercado laboral: empleados públicos, informales y cuentapropistas continúan aún mucho más rezagados en materia de restitución de poder adquisitivo.
