En el 2022 comenzaría a funcionar en Río Cuarto la granja de minado de bitcoins más grande de Argentina. La inversión, de 250 millones de dólares, es realizada por la compañía Bitfarms en el predio de la central térmoeléctrica Maranzana, propiedad del grupo Albanesi en la ciudad.
“Es un proyecto de construcción y administración de un data center, que se va a hacer en etapas y contempla llegar hasta los 210 megavatios. Los términos del contrato de compraventa de energía entre privados son confidenciales. No nos conectamos a la red. Estamos construyendo una subestación en Río Cuarto, es una inversión muy significativa. Empezaría a operar el año próximo”, confirmó a La Voz Damián Polla, Gerente General de Bitfarms para Latinoamérica.
Bitfarms es una compañía con domicilio en Quebec, Canada, fundada por argentinos, que cotiza en Wall Street (como $BITF) y en la bolsa de Toronto. La firma trabaja con computadoras que autorizan transacciones en criptomonedas, a cambio de lo cual reciben un pago en bitcoins. En Canadá tienen cinco instalaciones que utilizan una potencia eléctrica de 69 megawatios.
Polla confirmó que la mega granja de Río Cuarto generará 500 empleos durante su construcción y unos 100 cuando comience a operar el data center y un laboratorio tecnológico en la ciudad. Durante la operación, el proyecto tecnológico hará falta mano de obra calificada. Prevén traer expertos de Canadá y también llevar mano de obra local al exterior, para capacitarla.
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El gerente de Bitfarms explicó que eligieron Río Cuarto como locación, porque, con los avances tecnológicos, para los servers ya no es imprescindible un entorno con clima frío. “La decisión de instalarnos con Río Cuarto tiene que ver con la disponibilidad de capital humano, con el acuerdo que pudimos lograr con un generador que tiene capacidad ociosa, y con el apoyo que nos fueron dando los entes aplicables, tanto la municipalidad como la Provincia. Venimos trabajando también con los entes nacionales para llevar a cabo el proyecto”, precisó.
Polla anticipó “En Río Cuarto vamos a hacer una ampliación de barras, una línea de transmisión en el mismo predio, de 200 metros, una estación transformadora y cuatro naves industriales de cuatro mil metros cuadrados cada una. Estamos creciendo mucho y tenemos proyectos ambiciosos de expansión global”.
“No descartamos otra inversión en Argentina, en la región. Estamos continuamente mirando oportunidades”, expresó.
Lo que llamó la atención del mercado es el trascendido que indica que la instalación de Río Cuarto, durante los primeros cuatro años, produciría bitcoins al costo de 2,2 centavos de dólares por kilovatio hora, lo que implica una reducción importante del costo actual.
Confidencialidad
Polla no confirmó detalles del acuerdo privado, pero remarcó que “el contrato contempla una cierta inversión en infraestructura que en cualquier caso formaría parte de una tarifa”.
El contrato entre ambas empresas sería por ocho años y empleados de Río Cuarto serían capacitados en Canadá.
Bitfarms tiene cinco granjas para minar bitcoins en las afueras de Montreal, Canadá (con energía hidráulica) y alcanzó en agosto pasado el estatus de “unicornio”, al superar una valuación de mil millones de dólares (hoy ya vale 1200 millones de dólares). Hace tres meses comenzó a construir un proyecto piloto de 10 megas en Paraguay.
“Estamos muy contentos con cómo nos han recibido en Río Cuarto. Estamos en un momento en el que se necesita mucho apoyo de los entes y del municipio para llevar a cabo algo tan ambicioso. En pocas semanas la gente va a empezar a ver lo que está detrás de todo esto”, agregó el gerente de Bitfarms para Latinoamérica.
La Central Modesto Maranzana comenzó a operar en Río Cuarto en 1995, con una potencia instalada de 70 MW instalados por Arcor. Albanesi adquirió la central local (Generación Mediterránea) en el 2005 y en el 2017, llevó su capacidad instalada a los 350 MW.
