En una jornada marcada por el mal clima financiero global, la mayoría de los activos argentinos sufrieron un fuerte deterioro, reflejando además la incertidumbre interna.
La inquietud se reflejó especialmente en las cotizaciones de dólar futuro y en las opciones financieras, utilizadas por los inversores con fondos “en blanco” para transformar tenencias legales en moneda dura.
Los dólares futuros, que habían iniciado la rueda con subas de hasta 4% en algunas posiciones, recortaron ese aumento en los últimos minutos y avanzaron por debajo de 1%.
Por su parte, el dólar blue mostró un leve avance hasta los $1.325.
El peor escenario se dio en los ADRs de empresas argentinas que cotizan en Nueva York, con algunos papeles que cayeron más de 5%. Banco Supervielle retrocedió un 5,7%, Mercado Libre un 5,3%, Central Puerto un 5,1% e YPF un 4%.
En tanto, los bonos de la deuda pública se hundieron más de 2% en promedio, lo que disparó el resgo país a 867 puntos.
Este escenario se produjo por una confluencia de factores locales e internacionales.
La inestabilidad interna por el demorado acuerdo con el FMI se profundizó con el clima adverso internacional, generado por la crisis desatada por la política arancelaria de Donald Trump.
La debacle comenzó en la madrugada con una caída superior al 4% en la bolsa de Tokio, a la que se sumaron las bajas en las bolsas europeas y, más tarde, en Wall Street, donde el Nasdaq retrocedió un 1,88% y el Dow Jones un 0,3%.