Un total de 69 drones ucranianos que tenían como objetivo la capital de Rusia fueron derribados en un ataque masivo en las primeras horas del martes, explicó el alcalde de Moscú, Sergei Sobyanin.
El operativo, el más grande dirigido contra Moscú en meses, se produjo mientras una delegación ucraniana se preparaba para reunirse con el jefe de la diplomacia estadounidense en Arabia Saudí para discutir el fin de la guerra con Rusia, que dura ya tres años.
Al menos 11 de los drones fueron derribados en los distritos de Ramensky y Domodedovo de la región de Moscú, que rodea la capital rusa, dijo Sobyanin en la aplicación de mensajería Telegram. No especificó dónde fueron derribados los otros y solo apuntó que estaban “volando hacia Moscú”.
El gobernador de la región de Moscú, Andrei Vorobyov, reportó que una persona murió y otras tres resultaron heridas como resultado del ataque con drones, que además causó daños en siete apartamentos de un edificio residencial en el distrito de Ramensky.
Según Sobyanin, el tejado de un edificio en Moscú también sufrió daños que describió como “insignificantes”. Imágenes del edificio, publicadas por la agencia de noticias estatal RIA Novosti, mostraron una mancha carbonizada en la fachada de un edificio residencial de varios pisos, cerca del tejado, y trozos del revestimiento del inmueble caídos.
Se restringieron los vuelos en cuatro aeropuertos de Moscú, incluidos Domodedovo, Vnukovo y Zhukovsky al sur de la ciudad, y Sheremetyevo al norte, según la autoridad de aviación civil rusa, Rosaviatsia.
La circulación de trenes en la estación de Domodedovo también se detuvo brevemente, informaron funcionarios locales.
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Esta historia fue traducida del inglés por un editor de AP con la ayuda de una herramienta de inteligencia artificial generativa.
