Corea del Norte disparó el sábado varios misiles de crucero hacia el mar, dijo el ejército surcoreano, que se suman a otras pruebas de armas que ha hecho Pyongyang en respuesta a las recientes maniobras militares de Estados Unidos y Corea del Sur.
Las fuerzas armadas surcoreanas detectaron los lanzamientos el sábado por la mañana frente a la costa occidental norcoreana, indicó el Estado Mayor Conjunto de Corea del Sur en un comunicado.
Funcionarios de inteligencia surcoreanos y estadounidenses estaban analizando los detalles de los lanzamientos, añadió.
Los lanzamientos tuvieron lugar dos días después de que las fuerzas armadas de Estados Unidos y Corea del Sur concluyeron 11 días de maniobras, a las que Corea del Norte considera un ensayo de invasión. Washington y Seúl sostienen que sus maniobras son de carácter defensivo.
Misiles de Corea del Norte al mar
Un día antes de que Estados Unidos y Corea del Sur concluyeran sus maniobras, Corea del Norte disparó dos misiles balísticos de corto alcance hacia el mar para —afirmó— simular ataques nucleares de “tierra quemada” contra Corea del Sur.
Pyongyang dijo que efectuaría por separado ejercicios de puestos de mando para ensayar una ocupación del territorio surcoreano en caso de conflicto.
Desde comienzos de 2022, Corea del Norte ha efectuado más de 100 pruebas de armas, muchas de ellas lanzamientos de misiles balísticos que están prohibidos por resoluciones del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas.
Las pruebas de misiles de crucero de Pyongyang no están prohibidas, pero suponen una amenaza para los países adversarios porque se efectúan a menor altitud para evadir la detección de los radares. Según analistas, los misiles de crucero norcoreanos tienen como principal propósito atacar buques de guerra y portaaviones que se aproximen en caso de una guerra.
Expertos extranjeros afirman que Kim usa las maniobras militares entre Estados Unidos y Corea del Sur como pretexto para ampliar sus arsenales a fin de reforzar su posición en futuras negociaciones diplomáticas con Estados Unidos.
Dicen que Kim pretende que se reconozca a Corea del Norte como un Estado nuclear legítimo para conseguir que se levanten las sanciones de la ONU contra el país.
