LONDRES. Un británico de 19 años que mató a tiros a su madre y a sus dos hermanos menores, y que quería llevar a cabo un tiroteo escolar, no será elegible para la libertad condicional durante al menos 49 años.
En la audiencia de sentencia en el Tribunal de la Corona de Luton el miércoles, la jueza Bobbie Cheema-Grubb dijo que había considerado imponer a Nicholas Prosper una orden de cadena perpetua, pero optó por no hacerlo dada su edad —tenía 18 años en el momento de los tiroteos— y el hecho de que se había declarado culpable.
El mes pasado, Prosper admitió en una audiencia haber asesinado a su madre Juliana Falcon, de 48 años, y a su hermana Giselle Prosper, de 13 años, y a su hermano Kyle Prosper, de 16 años, en el apartamento de la familia en Luton, Bedfordshire, el 13 de septiembre. También apuñaló a su hermano más de 100 veces.
Enfermo mental y asesino
La jueza dijo que Prosper quería emular y superar atrocidades en todo el mundo, incluida la masacre en la Escuela Primaria Sandy Hook en Estados Unidos en diciembre de 2012, cuando 26 niños, incluyendo dos maestras, fueron asesinados, y la matanza de 30 personas en Virginia Tech en abril de 2007.
“Tu ambición era la notoriedad”, le dijo a Prosper, quien tuvo que ser obligado a acudir al tribunal para escuchar su destino. “Querías ser conocido póstumamente como el pistolero escolar más famoso del siglo XXI”.
La jueza señaló que el caso de Prosper presentaba muchos “temas recurrentes” que se han visto en tiroteos escolares en todo el mundo, incluido interés sexual en menores, abstracción en el mundo de internet, falta de empatía hacia las víctimas y la selección de un “uniforme” para los asesinatos.
El tribunal fue informado de que Prosper, quien no pudo seguir estudiando ni mantener un trabajo, logró falsificar una licencia de armas y la utilizó para comprar una escopeta y 100 cartuchos de un comerciante de armas legítimo el día antes de los asesinatos. Su plan, se dijo en el tribunal, era llevar a cabo un tiroteo masivo en su antigua escuela primaria el viernes 13.
Alrededor de las 5 de la mañana de ese día, Prosper realizó un disparo de prueba contra un oso de peluche en su dormitorio. Su madre ya se había despertado y se dio cuenta de que algo estaba “terriblemente mal”. Prosper la mató, dejando una copia de la novela “Cómo matar a tu familia” sobre sus piernas, antes de dispararle a su hermana mientras ella se escondía debajo de una mesa, y luego apuñalar y dispararle a su hermano.
Con la policía rodeando la zona después de que se reportó el ataque a su familia, Prosper les mostró a los oficiales dónde había escondido una escopeta cargada y 33 cartuchos en una calle cercana.
El superintendente de policía de Bedfordshire, Rob Hall, leyó una declaración en nombre del padre de Prosper, Raymond Prosper, en la que dijo que las muertes de su expareja Juliana y de su hijo Kyle y su hija Giselle, tenían “mucho más significado e importancia”.
“Sus muertes y la rápida respuesta de la policía de Bedfordshire evitaron que cualquier otra familia en la comunidad pasara por el dolor que hemos sufrido,” dijo.
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Esta historia fue traducida del inglés por un editor de AP con la ayuda de una herramienta de inteligencia artificial generativa.