El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, fue dado de alta este domingo tras someterse a una cirugía por una hemorragia cerebral.
El procedimiento se realizó después de que el líder izquierdista de 79 años sintiera dolores de cabeza que los médicos creyeron fueron resultado de una caída en su casa en octubre.
La salud de Lula da Silva: lo que se sabe
Lula canceló un viaje a Rusia para una cumbre de BRICS después del accidente, indicó su oficina en ese momento.
La caída le dejó un corte visible en la parte posterior de la cabeza, ligeramente por encima del cuello.
El mandatario se encontraba ingresado en el Hospital Sirio-Libanés de Sao Paulo, desde este viernes, en cuidados semiintensivos tras la mejoría experimentada.
Este sábado fue sometido a análisis de sangre y pruebas de imagen, de acuerdo con el último parte médico. “Sigue lúcido y orientado, y continúa caminando”, explicaron posteriormente los doctores.
Horas antes de eso, la Presidencia brasileña había publicado un vídeo de Lula, con ropa de hospital, caminando a ritmo lento pero seguro por los pasillos del centro médico acompañado del neurocirujano que dirige los procedimientos, Marcos Stavale.
“Agradezco cada oración y palabra de consuelo que he recibido en los últimos días. Les pido que mantengan la calma. ¡Soy firme y fuerte!”, dijo en ese momento el presidente antes de asegurar que está “hablando mucho, comiendo bien y, pronto, listo para regresar a casa y seguir trabajando y cuidando a cada familia brasileña”.
*Con información de Associated Press