El presidente electo Donald Trump ofreció el lunes una extensa conferencia de prensa en la que dijo que preservará el acceso a la vacuna contra la polio pero se mostró ambiguo respecto a otras vacunas, se comprometió a examinar la reducción de los costos de los medicamentos y expresó dudas sobre si su nuera podría ser la próxima senadora de Florida.
Trump habló durante más de una hora, la primera vez que respondió preguntas de los reporteros desde que ganó las elecciones. El evento hizo recordar las largas conferencias de prensa de su primer mandato y contrasta marcadamente con el presidente Joe Biden, quien no suele responder preguntas de los reporteros.
Aquí hay un vistazo a algunos de los temas que abordó:
Trump defendió su elección para secretario de Salud, el prominente escéptico de las vacunas Robert F. Kennedy Jr., pero dijo que personalmente es un “gran creyente” en la vacuna contra la polio y preservará el acceso a ella.
“No van a perder la vacuna contra la polio”, dijo. “Eso no va a suceder”.
Durante el fin de semana, el líder republicano del Senado, Mitch McConnell, quien tuvo polio de niño, defendió la vacuna contra la polio luego que un informe reciente revelara que uno de los asesores de Kennedy presentó una petición para revocar la aprobación de la vacuna contra la polio en 2022.
Kennedy ha promovido durante mucho tiempo la idea desacreditada de que las vacunas causan autismo. Trump pareció cuestionar si hay un vínculo, diciendo que “tratamos de averiguarlo” y resaltó el aumento de casos de autismo diagnosticados.
“Hay algo mal, y vamos a averiguarlo”, sostuvo.
No hay pruebas de sangre o biológicas para el autismo; en cambio, un médico basa el diagnóstico en el comportamiento del niño. Aunque el diagnóstico de autismo ha estado disponible desde hace al menos 80 años, la definición se amplió gradualmente para incluir casos más leves, que son más comunes. Un estudio del año pasado encontró que aproximadamente un cuarto de los niños con autismo —unos 110.000 en Estados Unidos— presentan la versión más severa de la discapacidad del desarrollo, lo que les ha dejado incapaces de hablar o con un coeficiente intelectual por debajo de 50 o ambos.
Sobre Kennedy, “va a ser mucho menos radical de lo que se pensaría”, dijo. “Creo que tiene una mente muy abierta, o no lo habría puesto allí”.
Trump describió una cena que tuvo este mes con Kennedy; el médico Mehmet Oz, un cirujano cardíaco convertido en presentador de programas de entrevistas y gurú del estilo de vida a quien ha elegido para dirigir los Centros de Servicios de Medicare y Medicaid; y altos ejecutivos farmacéuticos en la que discutieron los precios de los medicamentos.
Trump elogió a las compañías —las mismas que Kennedy ha argumentado rutinariamente que se benefician injustamente de los estadounidenses— pero dijo que el alto costo de la atención médica fue un enfoque de su cena.
“Lo que salió de esa reunión es que estamos pagando demasiado”, afirmó Trump.
Trump también criticó a los administradores de beneficios farmacéuticos, llamándolos “intermediarios horribles” que elevan el costo de los medicamentos. Las compañías farmacéuticas han estado presionando agresivamente al Congreso para restringir el papel de los administradores de beneficios farmacéuticos, que ayudan a los clientes más grandes de las compañías de seguros de salud a decidir cómo y qué medicamentos recetados estarán cubiertos en sus planes de seguro.
“No sé quiénes son estos intermediarios, pero son ricos como pocos”, subrayó Trump.
La conferencia de prensa fue la aparición pública más extensa de Trump desde su victoria hace seis semanas, una ausencia inusual del escenario público para la antigua estrella de reality.
Pero también subrayó cómo, incluso siendo aún presidente electo, Trump ha robado la atención a Biden, quien aún tiene un mes restante en su mandato. Biden no ha sostenido una conferencia de prensa en meses y ha tenido un horario público limitado.
Al tiempo que Trump abordaba algunos de los problemas más importantes del momento, incluidos los avistamientos de drones volando sobre el noreste de Estados Unidos, el propio Biden se ha mantenido en silencio, dejando a sus asistentes la tarea de tratar de tranquilizar a la población.
Trump desconoce si el gobernador de Florida, Ron DeSantis, nombrará a su nuera para ser senadora de Florida, ocupando el escaño que tiene Marco Rubio, quien ha sido nominado para secretario de Estado.
Ante la pregunta de si esperaba que DeSantis nombrara a Lara Trump para reemplazar a Rubio, Trump dijo: “Probablemente no, pero no lo sé”. Trump habló recientemente con DeSantis en un memorial para agentes policiales de Florida.
Los aliados de Trump han estado presionando a DeSantis para que nomine a Lara Trump, quien está casada con el hijo de Trump, Eric, y se desempeñó como copresidenta del Comité Nacional Republicano este año.
“Ron está haciendo un buen trabajo con su elección”, afirmó Trump, sin dar más detalles.
Elogió a Lara Trump, incluyendo por su trabajo en el Comité Nacional Republicano, donde parte de sus deberes incluían enfocarse en la “integridad electoral”, una prioridad de Trump después que él afirmara falsamente que se cometió un fraude en las elecciones presidenciales de 2020.
Trump indicó que examinará intervenir en la posible prohibición de TikTok en Estados Unidos. La popular plataforma de redes sociales debe cortar lazos con su empresa matriz con sede en China o enfrentar su prohibición a mediados de enero bajo una ley federal.
No ofreció detalles específicos, pero Trump acreditó a la plataforma por ayudarlo a ganar las elecciones. Su campaña la consideró como un puente para llegar a votantes más jóvenes y menos comprometidos políticamente, en especial cuando se difundieron clips que lo mostraban con celebridades en peleas de UFC.
“Vamos a echar un vistazo a TikTok”, dijo. “Ya saben, tengo un lugar especial en mi corazón para TikTok”.
Trump intentó prohibir TikTok durante su primer mandato, pero cambió de opinión y se comprometió a “salvar” TikTok. Una vez que asuma el cargo, su Departamento de Justicia será el encargado en hacer cumplir la nueva ley federal contra TikTok.
Trump señaló las diferencias entre la primera vez que iba a asumir el cargo hace ocho años y hoy, diciendo que los ejecutivos ahora quieren reunirse con él.
“Eran hostiles en ese entonces”, recordó.
“Todos me combatían”, dijo sobre su primer mandato. “En este mandato, todo el mundo quiere ser mi amigo. No sé. Mi personalidad cambió o algo así”.
Si bien dejó el cargo en 2021 relegado y enojado, Trump ha tenido un cambio sorprendente que llevó a su victoria electoral. La semana pasada, fue honrado al ser nombrado Persona del Año por la revista Time y al tocar la campana de apertura en la Bolsa de Valores de Nueva York.
Desde que se convirtió en presidente electo, Trump se ha reunido con multimillonarios de Silicon Valley, entre ellos el fundador de Facebook, Mark Zuckerberg, el CEO de Apple, Tim Cook, y el CEO de Google, Sundar Pichai. Reveló que también se había reunido con el cofundador de Google, Sergey Brin. El fundador de Amazon, Jeff Bezos, se reunirá con él esta semana, anunció Trump.
“Se han acercado muchos grandes ejecutivos, los mejores ejecutivos, los mejores banqueros, todos están llamando”, dijo. “Es una situación completamente opuesta a la de mi primer mandato”.
Con múltiples guerras en curso, Trump ha buscado volver a insertarse en el escenario mundial. Dijo que trabaja para conseguir que los rehenes israelíes retenidos por Hamás en Gaza sean liberados y tuvo una “muy buena conversación” con el primer ministro israelí Benjamin Netanyahu.
Pero el lunes pareció moderar las expectativas sobre su promesa de resolver la guerra entre Rusia y Ucrania incluso antes de asumir el cargo, describiendo el conflicto como “difícil” y “desagradable”.
“Estamos tratando de detener esa guerra, esa horrible, horrible guerra”, dijo. “Es difícil. Es desagradable. Es desagradable. La gente está siendo asesinada a niveles que nadie ha visto nunca”.
La invasión de Rusia a Ucrania es el mayor conflicto armado en Europa desde la Segunda Guerra Mundial y ha costado decenas de miles de vidas en ambos bandos.
Trump se negó a decir si ha hablado con el presidente ruso Vladímir Putin desde que ganó las elecciones. Se reunió con el presidente ucraniano Volodymyr Zelenskyy en París este mes cuando acudió a la reapertura de la Catedral de Notre Dame.
El próximo secretario de prensa de Trump ha dicho que el presidente electo invitó al presidente chino Xi Jinping y otros mandatarios mundiales a la ceremonia de su toma de protesta el 20 de enero, pero Trump dijo el lunes que Zelenskyy no estaba entre ellos.
“Si le gustaría venir, me gustaría tenerlo”, dijo Trump.
Trump añadió que Xi aún no ha confirmado si acudirá. Describió al presidente chino como “un amigo mío” y “un tipo increíble” pero reconoció que la pandemia de COVID-19 había afectado su relación.
“Fue un puente demasiado alejado para mí”, subrayó.
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Esta historia fue traducida del inglés por un editor de AP con la ayuda de una herramienta de inteligencia artificial generativa.
