TIRANA, Albania (AP) — Las votaciones parlamentarias de Albania concluyeron el domingo tras una ruidosa campaña dominada por el esfuerzo del país por unirse a la Unión Europea y la candidatura del primer ministro Edi Rama para un cuarto mandato.
Las urnas cerraron a las 7 de la tarde (1700 GMT) y se espera que el conteo de votos concluya en 48 horas.
Debido a la emigración masiva, el país de 2,8 millones de personas cuenta con aproximadamente 3,7 millones de votantes elegibles. Por primera vez, aquellos en la diáspora —alrededor de 191.000 hasta ahora— pudieron votar por correo.
Los votantes estaban eligiendo a 140 legisladores para mandatos de cuatro años, eligiendo entre 2.046 candidatos que representan a 11 agrupaciones políticas, incluidas tres coaliciones.
La participación preliminar a las 6 de la tarde era del 41,41%, un 4% menos que en 2021.
El Partido Socialista de Rama afirma que puede lograr la membresía en la UE en cinco años, manteniéndose fiel a una promesa ambiciosa mientras lucha contra oponentes conservadores con recriminaciones públicas y promesas competidoras de aumentos salariales.
Abrir la elección a votantes en el extranjero por primera vez ha añadido volatilidad, junto con la aparición de nuevos partidos, un cambio en la campaña hacia las redes sociales y una reciente prohibición de TikTok.
La votación fue en gran medida pacífica; solo hubo unos pocos enfrentamientos entre candidatos y algunos seguidores en todo el país.
“En su mayoría, excluyendo algunos casos esporádicos, el proceso ha estado en línea con las reglas y estándares”, afirmó Ilirjan Celibashi, jefe de la Comisión Electoral Central.
Rama, de 60 años, quien aseguró el inicio de las negociaciones de membresía en la UE en octubre, destacó logros en infraestructura y reforma judicial en su campaña.
“Hoy es la palabra del pueblo. Esperemos a que el pueblo hable”, expresó Rama después de votar.
La jefa de política exterior de la UE, Kaja Kallas, está presionando a Albania para que continúe con las reformas, particularmente en gobernanza y esfuerzos anticorrupción, para mantenerse en el camino hacia la membresía el bloque europeo.
El principal rival de Rama es Sali Berisha, de 80 años, un expresidente y primer ministro, quien argumenta que Albania aún no está lista para la membresía en la UE. Comenzó la campaña tomando prestado el eslogan del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, que cambió a "Hacer a Albania Grande de Nuevo", pero finalmente se decidió por "Albania Grandiosa".
Las preocupaciones económicas han sido centrales en la campaña.
Los socialistas prometen acelerar el auge turístico, de 10 millones de llegadas en 2024 a 30 millones para 2030, diversificando destinos mediante la expansión de proyectos de infraestructura.
Los demócratas argumentan que el pésimo desempeño del gobierno ha llevado a más de 1 millón de albaneses a abandonar el país en la última década.
Después de votar, Berisha llamó a los albaneses a votar "por ellos mismos, por sus hijos, sus pensiones y salarios, empleo, negocios, su granja".
Ambos partidos hicieron promesas similares sobre pensiones mínimas, un salario mensual promedio y un salario mínimo, todos alrededor de un 20% o más que los niveles actuales.
Pero el analista Lutfi Dervishi consideró que ese escenario es poco probable.
"Es una campaña sin debate y resultados sin sorpresas", dijo. "Las elecciones no sacudirán la escena actual, ni el sistema, ni los principales actores".
A pesar de la mejora significativa de Albania en el índice de corrupción de Transparencia Internacional —subió del puesto 116 en 2013 al 80 en el ranking de 2024— la corrupción sigue siendo el talón de Aquiles del país y un obstáculo para la integración europea.
Las reformas judiciales de 2016 con el apoyo de la UE y Estados Unidos llevaron a investigaciones y el enjuiciamiento de funcionarios. Varios exministros, alcaldes y altos funcionarios han sido encarcelados, mientras que otros enfrentan investigaciones en curso.
A pesar de las promesas de un gobierno más limpio, ambos partidos principales presentaron candidatos que enfrentan acusaciones de corrupción, incluido Berisha, quien está a la espera de juicio.
Mientras los socialistas de Rama se atribuyen el mérito de la reforma judicial, Berisha ha prometido disolverla, describiéndola como una herramienta de la justicia selectiva del gobierno de Rama.
Las redes sociales se han convertido en un vehículo principal para la campaña. Rama organizó transmisiones en vivo diarias en Facebook para interactuar con los votantes. Berisha hizo lo mismo, aunque con menos frecuencia.
El gobierno ha impuesto una prohibición de 12 meses a TikTok, citando preocupaciones sobre incitación y acoso en línea. Los partidos de oposición condenaron la medida como censura.
Un código de conducta introducido por el ombudsman para fomentar una campaña ética fracasó a medida que el discurso político se volvió cada vez más tóxico. Rama describe a Berisha como un "búho del pantano", una metáfora para la corrupción, mientras que Berisha dice que Rama es un "jefe gánster".
Más de 570 observadores internacionales monitorearon las elecciones parlamentarias de este año. Planean dar una conferencia de prensa el lunes.
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Esta historia fue traducida del inglés por un editor de AP con la ayuda de una herramienta de inteligencia artificial generativa.