BUENOS AIRES (AP) — La Confederación General del Trabajo, la principal central sindical argentina, se movilizaba el miércoles en Buenos Aires en protesta por las políticas de ajuste del presidente Javier Milei en el preludio de una huelga general de 24 horas convocada para el día siguiente en todo el país.
Los distintos gremios que conforman la CGT comenzaron a manifestarse al mediodía en las calles de la capital y acompañarán a diversas agrupaciones de jubilados en la protesta semanal que realizan en reclamo de un aumento de sus mermados ingresos.
A la misma manifestación se sumarán agrupaciones políticas y sociales, grupos universitarios e hinchas de un club de fútbol. La protesta culminará por la tarde en la plaza situada frente al Congreso.
Alejandro Gramajo, secretario general de la Unión de Trabajadores y Trabajadoras de la Economía Popular —una de las organizaciones sociales de izquierda más combativas — manifestó su solidaridad con los jubilados.
“Esta es una marcha especial, previa a un paro general que será contundente y tendrá una adhesión importante de los trabajadores. Más allá de que el gobierno intenta establecer un relato económico, los trabajadores no llegan a fin de mes, no pueden darle de comer a sus hijos”, afirmó Gramajo.
Jubilados y pensionados marchan cada miércoles en repudio a las medidas de ajuste de Milei reclamando un aumento de haberes y la restitución del 100% de los medicamentos que recibían gratis del Estado y que cesó en diciembre.
Las jubilación mínima en abril se fijó en algo más de 285.000 pesos (unos 260 dólares), insuficiente para cubrir las necesidades básicas, denuncian las agrupaciones de jubilados.
Las marchas de los jubilados tomaron notoriedad después de que en marzo hinchas de clubes de fútbol y otras agrupaciones opositoras al gobierno las acompañaron y derivaron en violentos enfrentamientos con las fuerzas de seguridad. El 12 de marzo un fotógrafo resultó gravemente herido y fue internado en terapia intensiva debido a las heridas en la cabeza causadas por una lata de gas lacrimógeno lanzada por un miembro de las fuerzas de seguridad.
Sobre el paro previsto para el jueves —el tercero que enfrenta Milei desde el inicio de su gobierno en diciembre de 2023— Rodolfo Aguiar, titular de la Asociación de Trabajadores del Estado, dijo que busca "apagar la motosierra contra el Estado argentino”.
“Los trabajadores estatales no damos más, el nivel de consenso de la medida es total.... el Estado no soporta un recorte más", dijo Aguiar.
El jefe de Gabinete, Guillermo Francos, señaló que al gobierno no le preocupa la huelga. “Después la sociedad juzgará si los dirigentes sindicales tienen representatividad o no", cuestionó.
La huelga promete dejar paralizados los vuelos en los aeropuertos del país, la recolección de basura, los trenes de pasajeros, el metro y la actividad bancaria.