BUENOS AIRES (AP) — El gobierno del ultraderechista argentino Javier Milei endureció las restricciones para asistir a los estadios del fútbol argentino en coincidencia con la decisión de hinchadas de varios clubes de participar por primera vez el miércoles en una protesta semanal de jubilados frente al Congreso contra las políticas de ajuste.
En un hecho sin precedentes, fanáticos de Boca Juniors, River Plate y otros equipos de primera y segunda categoría se sumarán al grupo de jubilados que una vez por semana reclaman en el centro de Buenos Aires contra el recorte en jubilaciones y pensiones.
La convocatoria tiene por consigna “defender” a los ancianos luego que hace una semana la policía los dispersara con gases lacrimógenos y golpes de bastones cuando interrumpieron el tránsito vehicular frente al Parlamento, en violación al nuevo código de conducta para manifestaciones que impuso Milei al poco de asumir.
En una resolución publicada el miércoles, el ministerio de Seguridad incluyó una causal para prohibir el acceso a un estadio de fútbol a quien “hubiere tenido conductas violentas contra las personas o las cosas o que afectaren la seguridad, el tránsito vehicular o el orden público, ya sea de manera individual o en el marco de una manifestación o congregación en la vía pública o en lugares abiertos al público en general, con o sin desplazamiento, cualquiera sea su naturaleza”.
Esto significa que cualquier hincha que participe en desmanes el miércoles no podrá asistir a los partidos de su equipo por el plazo que fijen las autoridades.
El presidente Milei terminó su primer año de gobierno con superávit fiscal y primario por primera vez desde 2010, como consecuencia de un fuerte recorte del gasto público que afectó jubilaciones y pensiones, entre otros ítems.
Milei dispuso por decreto en marzo de 2024 que las jubilaciones se actualizarían mensualmente en función del último dato de inflación disponible. Si bien el gobierno logró en un año controlar la inflación, los jubilados se quejan de que sus ingresos van siempre por detrás debido a que la nueva fórmula se implementó luego de la devaluación del 50% de la moneda local en diciembre de 2023.
Además del recorte de ingresos, el gobierno también modificó el plan de salud de la obra social de los jubilados y restringió la entrega de medicación gratuita.
En febrero, un jubilado cobró de mínima el equivalente a unos 300 dólares. En Buenos Aires, el costo de la canasta básica de un adulto mayor —incluye vivienda, alimentos, medicación, entre otros— cuesta más del doble de ese monto, según la Defensoría de la Tercera Edad.