MONTERREY, México (AP) — La mediocampista Lizbeth Ovalle anotó un gol de antología para el club mexicano Tigres el lunes por la noche, cuando tocó el balón sin mirar sobre la arquera con su talón izquierdo.
Ovalle estaba de espaldas a la portería cuando recibió un centro desde la izquierda de la delantera española Jenni Hermoso en el borde del área penal, pero saltó y se giró en el aire para enviar un sutil toque de talón por debajo del travesaño.
Hermoso — la jugadora a quien besó Luis Rubiales en la final de la Copa Mundial Femenina 2023 — cayó de rodillas en aparente incredulidad al ver entrar el balón, mientras que la “Maga” Ovalle corría hacia los brazos de sus compañeras en el banquillo de Tigres.
“Ni yo sé cómo lo hice. Ni lo he visto”, dijo Ovalle en la entrevista a pie de cancha.
La definición es conocida como un “gol de escorpión” y el ejecutado por el arquero colombiano René Higuita en un partido amistoso contra Inglaterra en 1995 es uno de los más célebres de la historia.
Ovalle bromeó cuando le preguntaron sobre cómo denominaría su golazo: “Le llamaré ‘el camaroncín’”.
Tigres venció 2-0 a Guadalajara la Liga MX Femenil, la máxima categoría del fútbol femenino en México.