COLUMBIA, Carolina del Sur, EE.UU. (AP) — Una universidad cristiana privada de Carolina del Sur, con 180 años de antigüedad, cerrará al final del semestre porque no logró recaudar 6 millones de dólares para mantener sus puertas abiertas.
Las autoridades de la Universidad Limestone dijeron que, tras dos semanas de intensa recaudación de fondos y otras acciones, solo lograron reunir un poco más de 2 millones de dólares y no tuvieron más opción que cerrar su campus en Gaffney y sus programas en línea.
La escuela había perdido alrededor de la mitad de su matrícula en la última década.
“Nuestro espíritu de Limestone perdurará a través de las vidas de nuestros estudiantes y exalumnos que lo llevan adelante en el mundo”, señaló Randall Richardson, presidente de los fideicomisarios de Limestone. “Aunque nuestras puertas puedan cerrarse, el impacto de la Universidad Limestone vivirá”.
La universidad sorprendió a sus estudiantes, exalumnos y a la comunidad cuando anunció a principios de abril, sin previo aviso, que estaba en tan mala situación financiera que, sin una inyección inmediata de 6 millones de dólares, tendría que cerrar.
Más de 200 personas donaron un total de aproximadamente 2,1 millones de dólares, pero no fue suficiente. La institución dijo que las donaciones serán devueltas.
Los legisladores de Carolina del Sur decidieron no intervenir porque se trata de una institución privada.
Las universidades y colegios privados como Limestone han cerrado a un ritmo de aproximadamente dos por mes, según la Asociación de Directores Ejecutivos de Educación Superior del Estado.
Otras universidades de todo el país han cerrado debido a que enfrentan fuertes disminuciones en la matrícula, una consecuencia de los cambios demográficos y de los efectos de la pandemia.
Decenas de miles de estudiantes de repente encuentran que sus carreras universitarias están en el limbo y varios de ellos nunca regresan a la escuela. La Universidad Limestone prometió ayudar a todos sus alumnos a transferirse a otras escuelas.
La institución tenía alrededor de 3.200 estudiantes en 2014, pero en una década, la matrícula en línea y presencial se redujo a aproximadamente 1.600, según datos estatales de educación superior.
El cierre también dejará a varios cientos de profesores y personal de apoyo sin empleo en Gaffney, una ciudad de aproximadamente 12.500 habitantes, situada en la Interestatal 85 entre Charlotte, Carolina del Norte, y Spartanburg.
Unos 50 estudiantes se congregaron fuera del sitio donde los fideicomisarios se reunieron el martes por la noche y se abrazaron al recibir el correo electrónico que anunciaba el cierre de la universidad.
Daniel Deneen Jr. de Myrtle Beach jugó fútbol americano para Limestone y se sorprendió al tener que cambiar sus planes de educación.
Deneen comentó al Post and Courier: “Cuando nos enteramos de que la escuela tenía una deuda de 30 millones de dólares, todos nos preguntamos cómo iban a salir de eso. Las últimas dos semanas han sido muy estresantes, pues los exámenes finales se realizarán esta semana”.
La Universidad Limestone, fundada en 1845, celebrará su última ceremonia de graduación el sábado.
Esa no es la única universidad de la región que ha anunciado su cierre este mes.
La Universidad St. Andrews, a unos 241 kilómetros (150 millas) de distancia en Laurinburg, Carolina del Norte, cerrará el domingo después del semestre de primavera. La escuela es un campus filial de la Universidad Internacional Webber.
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Esta historia fue traducida del inglés por un editor de AP con la ayuda de una herramienta de inteligencia artificial generativa.
