Las tarifas de los peajes de toda la Red de Accesos a Córdoba (RAC) aumentaron este domingo.
Los automóviles (categoría 2), ahora deben pagar $ 1.000 por cada traspaso por cualquiera de las cabinas que rodean la capital cordobesa.
El nuevo valor rige, por ahora, sólo para aquellos que abonen en efectivo. Es decir, como había pedido Caminos de las Sierras, el aumento no impacta en aquellos que tienen el sistema de pago diferido por lectura de patente (telepase).
Estos usuarios seguirán pagando $ 800 y podrán seguir gozando de los descuentos por usuario frecuente que regían hasta ahora.
El aumento fue avalado por el Ersep con la publicación el viernes de la resolución general 108 en el Boletín Oficial, norma que ameritó una edición extraordinaria del órgano de difusión provincial.
En la misma resolución, el organismo de control también avaló la creación de un nuevo mecanismo mensual de incremento de las tarifas de los peajes siguiendo una fórmula polinómica que publicará la Dirección de Estadística y Censos de la Provincia.
El cálculo se asentará en una polinómica que toma la variación mensual de la inflación de Córdoba, en el aumento de los costos de la obra pública y en los cambios en el dólar. Los dos primeros datos son publicados todos los meses por la Provincia.
El nuevo mecanismo que pidió la empresa de la que la Provincia es el accionista mayoritario tuvo el aval de una audiencia pública realizada el 20 de agosto.
Este nuevo sistema es similar al que desde junio usa Epec para aplicar los incrementos mensuales del valor agregado de distribución (VAD).
El aumento autorizado ahora y que rige desde septiembre es del 50% en las tarifas, para llevar el valor de cada traspaso de $ 800 a $ 1.200 para la categoría automóviles.
Por ahora
De forma temporal, como está dicho, Caminos de las Sierras cobrará una “tarifa preferencial” de $ 1.000 para los que paguen en efectivo y de $ 800 para los que abonen con el sistema de telepase (que “lee” las patentes y se paga a mes vencido con tarjeta o débito automático).
El objetivo es desincentivar el pago en efectivo, por lo que el nuevo esquema habilita a la empresa a cobrar hasta un 200% más sobre la tarifa vigente a quienes abonen con dinero y sean de otra jurisdicción.
Entre los argumentos, la empresa dice que es para aportar más fluidez al tránsito, ya que, “al eliminar la necesidad de detenerse, reduce significativamente la congestión (...), disminuyendo el tiempo total del viaje”.
También habla de eficiencia operativa porque se “disminuye la posibilidad de los errores derivados del cobro manual” y de seguridad, porque “se eliminan las paradas abruptas”, reduciendo “el riesgo de accidentes en zona de peajes”.
Asimismo, argumenta un menor impacto ambiental. “Al tener menor cantidad de paradas y arranques en las cabinas, se reducen el consumo de combustible y las emisiones de gases contaminantes, y hay una menor contaminación acústica”, justifica.
El sistema de ajuste por la polinómica, que busca agilizar los incrementos en un entorno altamente inflacionario, mantiene la intervención de la gerencia específica dentro del ente de control y del área de costos y tarifas, pero prescinde de una audiencia particular para cada aumento. Caminos dice que el nuevo procedimiento “busca dar previsibilidad al usuario, agilizar el proceso y garantizar un servicio de calidad”.
