17 diputados cordobeses participaron de la sesión donde se aprobó un aumento del 7,2% en los haberes jubilatorios y elevar el bono de $ 70.000 que reciben los adultos mayores con ingresos mínimos a $ 110.000. Faltó uno, Ignacio García Aresca, el más cercano los diputados de Encuentro Federal al gobernador Martín Llaryora.
De los que estuvieron en el recinto, 8 votaron a favor del aumento, seis en contra y hubo tres abstenciones, la de los radicales.
No todos usaron de la palabra pero, ¿cómo argumentaron sus posiciones los que sí lo hicieron?
De acuerdo con el diario de sesiones de la Cámara de Diputados, algunas de sus expresiones fueron las siguientes:
La culpa de Milei
A favor del aumento, Natalia de la Sota (Identidad Córdoba), consideró que el “desfinanciamiento de los fondos destinados a las prestaciones comenzó con la Ley Bases en diciembre de 2023”, impulsada por el presidente Javier Milei. “Evidentemente, hay una emergencia y tenemos que hacer algo al respecto”, indicó.
“Es momento de ser humanos, de tomar conciencia de que detrás de un número hay una vida, hay una familia, hay una necesidad”, enfatizó. “La moratoria previsional es una herramienta justa, como otras que el Congreso aprobó para grandes sectores económicos. ¿O acaso no se le condonaron deudas a grandes empleadores en la Ley Bases?”.
Pablo Carro (Frente de Todos), por su parte, fue en la misma línea argumental. “Hace rato que cada vez que queremos promocionar algo, la manera de hacerlo es que las patronales no hagan los aportes jubilatorios. Después vienen acá a explicarnos que se desfinancian las cajas jubilatorias. Entonces, pongámonos de acuerdo”, explicó.
“Se habla del costo fiscal del bono. Pero estamos hablando de apenas el 0,3 por ciento del PBI. ¿Qué es eso comparado con la caída del poder adquisitivo de los jubilados en los últimos meses? Lo que hay que hacer es incorporar ese bono al haber y devolver la moratoria. Eso es lo justo”, subrayó.
Gabriela Estévez, del mismo bloque que Carro, remarcó que el fin de la “moratoria previsional tiene además un sesgo de género y un sesgo de clase”. “Hoy estamos dejando sin jubilación a esa mujer que no pudo tener trabajo formal. La prórroga de la moratoria implica el 0,08 por ciento del PBI. Este dato me parece central”, puntualizó.
“Lo que estamos diciendo es que hay 5 puntos de financiamiento que nosotros le vamos a proponer al dictamen de mayoría para que incorporen y podamos unificar. No se trata de duplicar ni de regalar; se trata de reparar un derecho. Nadie se salva por este bono, pero sí ayuda a miles”, completó.
La diputada Alejandra Torres (Encuentro Federal) explicó su decisión de votar a favor del aumento a jubilados y del bono, fundamentando su postura en aspectos técnicos, institucionales y de equilibrio fiscal.
“Se presentaron en la Comisión de Previsión y Seguridad Social más de veinte proyectos, que se pueden agrupar en dos grupos. Algunos proyectos plantean la necesidad de recomponer el haber previsional, incluyendo el bono”, detalló.
Indicó que otras iniciativas “hablan de qué hacer ante el vencimiento de la moratoria previsional, ya que si uno analiza las bases de datos llega a la conclusión de que solo el 20 por ciento de las personas cumple con los requisitos exigidos por la legislación vigente para poder jubilarse, que es contar con treinta años de aportes al llegar a la edad jubilatoria”.
“Este proyecto tiene una evaluación técnica y económica que no genera ningún tipo de déficit fiscal. Es decir, no existe ningún problema que pueda alterar el equilibrio fiscal, algo que todos queremos acompañar”, afirmó la diputada.
“Demagogia e irresponsable”
Mientras tanto, entre quienes argumentaron su voto en contra, Luis Picat (UCR alineada con el Gobierno), contestó: “Lamentablemente, los dictámenes de mayoría utilizan de manera demagógica e irresponsable estos temas sensibles que, por supuesto, al ser complejos, son de soluciones múltiples. La irresponsabilidad también es de aquellos partidos que han dado quórum en el día de hoy. Generar un costo fiscal de casi 7.000 millones de dólares es insostenible”, recalcó en su mensaje.
“Esa quimera y alquimia que quieren hacer rebajando impuestos y queriendo ser populistas y repartir plata que no es de ellos, termina sin darle solución a la gente”, enfatizó. “Nuestro bloque va a acompañar el dictamen de minoría. Es una manera de dar solución responsable”, dijo.
María Celeste Ponce (de La Libertad Avanza) aseveró que su ingreso a la política no fue “para quedar bien con la gente, sino para hacer aquello para lo que la gente nos votó. Eso también incluye que los impuestos de todos los contribuyentes se distribuyan de la mejor forma posible y no se malgasten”.
“Estoy convencidísima de que, si los diputados ganáramos lo que gana un residente del Garrahan, este Congreso quedaría por lo menos la mitad vacío”, inquirió a sus colegas.
Del mismo bloque oficialista, Gabriel Bornoroni, concluyó en que con “haber votado una moratoria que va a seguir socavando el sistema previsional, quieren avanzar para liquidar el sistema de protección de personas con discapacidad. No sirve ampliar derechos cuando no se pueden garantizar”, expuso.
“No vamos a ser cómplices de fundir un sistema más, como ha hecho el kirchnerismo hasta ahora, simplemente por querer ganar un votito más. No vuelven más”, chicaneó.
Radicales y su “mirada justa”
Gabriela Brouwer de Koning (UCR), quien se abstuvo, junto con los demás radicales, defendió el propio proyecto del bloque que “pretende reconocer a las personas que han aportado durante toda su vida, muchísimos años, pero que a la edad que se jubilan no logran lamentablemente cumplir con uno de los requisitos de nuestro sistema previsional, que son los 30 años de aportes. Entonces, ¿de qué vale aportar? ¿De qué vale el esfuerzo si después, al final del camino, todos vamos a cobrar igual?”.
“La Argentina gasta lo mismo que muchísimos países con poblaciones más envejecidas; tiene más de 200 regímenes de excepción por los que son beneficiadas un 40 por ciento de las personas y que implica más de la mitad del gasto del sistema previsional”, reclamó. Por ello defendió el proyecto propio: “Se trata de una mirada justa”.
