El sector agropecuario fue un aliado permanente de las gestiones provinciales peronistas. Tanto José Manuel de la Sota como Juan Schiaretti siempre sostuvieron una alianza con el campo, y fue el interior el puntal de los triunfos del oficialismo.
Esa realidad pareció modificarse en las últimas elecciones provinciales, en las cuales Martín Llaryora sustentó su triunfo con los votos en la Capital y no tanto con el interior, donde Luis Juez tuvo un muy buen desempeño con Juntos por el Cambio.
Sin embargo, el próximo gobernador está decidido a alimentar la buena sintonía con el interior. Días atrás, cuando acompañó a Schiaretti en un viaje en avión a Coronda, Santa Fe, el gobernador electo vio desde el aire cómo está impactando la sequía en los campos.
“Lo único verde son los campos que tienen riego artificial. Hay que trabajar para que esta tecnología se expanda en el interior”, dicen que Llaryora lanzó a los colaboradores que lo acompañaban.
Lo primero que hizo Llaryora cuando regresó a Córdoba fue hablar con el ministro de Agricultura, Sergio Busso, quien seguirá en el cargo, para que comience a trabajar en un plan para asistir a los productores agropecuarios para que implementen el riego. Seguramente habrá una asistencia financiera del Banco de Córdoba para que haya más campos que no dependen únicamente del clima.
Por ahora, es un proyecto, pero está claro que, pese a tener su base electoral en la Capital, Llaryora piensa en alimentar la prolongada alianza del PJ con el sector ruralista.
Prunotto levanta el perfil y busca votos radicales para Schiaretti
En la recta final de la campaña presidencial, el PJ provincial comenzó a moverse para repartir la boleta de la candidatura presidencial de Juan Schiaretti, quien encabeza la alianza Hacemos por Nuestro País. En los últimos días, quien se mostró muy activa en la campaña presidencial fue la vicegobernadora electa, Miryan Prunotto.
La dirigente radical estuvo en el debate presidencial de Santiago del Estero, pero su rol principal es recorrer el interior de la provincia buscando votos de radicales disconformes con la candidata Patricia Bullrich, para que apoyen a Schiaretti.
Prunotto visitó varias localidades del departamento Río Cuarto. La dirigente radical que preside el Ente Metropolitano y es intendenta en uso de licencia en Estación Juárez Celman, estuvo los últimos días en Alcira Gigena, Chucul y Washington. En cada una de esas localidades mantuvo reuniones con quienes estarían dispuestos a votar al gobernador como candidato presidencial.
En el oficialismo, aseguran que más allá del excelente vínculo que construyó con Martín Llaryora, el primero que apostó por Prunotto para que se sume a la alianza oficialista fue el actual gobernador.
Los schiarettistas puros dicen que su líder es “el padre” del partido cordobés que proyecta el próximo mandatario. “No hubo ni habrá una discusión en ese sentido. El primero que habló de renovar el PJ y buscar una alianza con distintos sectores fue ‘el Gringo’. A Martín (Llaryora) le va a tocar hacerlo realidad”, dijo un funcionario schiarettista que hoy no tendría lugar en el próximo gabinete llaryorista.
Los libertarios confían en mejorar la fiscalización
En La Libertad Avanza hubo denuncias públicas respecto de una probable pérdida de votos como fruto de falencias al momento de la fiscalización en las Paso. Como fuerza nueva, el espacio que lidera Javier Milei sintió el rigor de no contar con militantes y punteros tradicionales a cargo en la mayoría de las mesas de elección. A eso se suma la escasa articulación que existe aún hoy entre el candidato y los referentes en cada una de las provincias.
En Córdoba, los libertarios aseguran que para las Paso lograron movilizar a unos dos mil voluntarios que se anotaron a través de las redes sociales y se organizaron como pudieron. El empresario y candidato Gabriel Bornoroni –segundo en la lista de postulantes a ingresar al Congreso por Córdoba– es quien lidera esa organización.
Para los comicios del domingo próximo, los libertarios aseguran que van a poder aumentar significativamente el número de fiscales. “Confiamos en tener la cantidad total para cubrir todas las mesas. En la Capital lo tenemos asegurado y esperamos mejorar mucho la fiscalización en el interior”, aseguran en La Libertad Avanza cordobesa.
Para cubrir toda la provincia son necesarios unos nueve mil fiscales, a razón de uno por mesa. Las fuerzas más grandes, en especial el oficialismo provincial, movilizan unos 18 mil, dos por mesa, para poder cubrir toda la jornada de votación.
Tironeo por lugares en el gabinete de Passerini
En el peronismo cordobés (ampliado a “partido cordobés”), son cientos los que caminan por las paredes, ansiosos de saber qué lugar ocuparán en el próximo esquema. Si tendrán un ascenso, un descenso o si su silla será para un nuevo aliado llegado desde el PRO o el radicalismo.
En ese marco, ante cada mínima certeza se desata un torbellino de rumores sobre cómo se ocuparán los lugares que se liberan.
Algo de esto pasó en el ente municipal Córdoba Obras y Servicios (Coys), al darse por confirmado que su actual titular, Victoria Flores, será la próxima ministra de Ambiente de la Provincia.
Quien sonó fuerte en la semana para reemplazarla en el cargo que hoy ocupa es la actual subsecretaria de Gestión Ambiental, Constanza Mías, quien milita con Daniel Passerini.
Aunque no hay nada definido, en el área de ambiente de la Municipalidad de Córdoba se comentó con insistencia que el próximo intendente quería a Mías en el principal despacho del Coys.
