La ministra de Seguridad Nacional, Patricia Bullrich, se mostró firme en su defensa del gendarme que hirió en la cabeza al fotógrafo Pablo Grillo durante la manifestación frente al Congreso la semana pasada. En declaraciones a LN+, Bullrich aseguró que “todos los gendarmes tiran como tienen que tirar”. Este lunes el Gobierno además denunció a la jueza Karina Andrade que ordenó liberar a los detenidos.
Bullrich desestimó las críticas sobre el accionar de Gendarmería, afirmando que “se respetaron los procedimientos”. Enfatizó que los videos del momento del disparo contra el fotoperiodista, quien se encuentra internado en grave estado, le parecieron “poco profesionales”.
Bullrich adelantó además que pagarán una recompensa a quienes aporten datos sobre los violentos en las protestas. La ministra de Seguridad aseguró que se trata de un programa que busca “restablecer la paz” en la ciudadanía tras los incidentes en la manifestación del miércoles pasado.
Caso Pablo Grillo: qué dijo Bullrich
La ministra ofreció una explicación sobre el incidente en el caso Grillo, sugiriendo que el proyectil podría haber rebotado antes de impactar a Grillo: “Ahí pusieron un arma mortal. Eso rebota dos veces antes y toca un hierro. No sé qué fue, porque no tengo el parte médico. No sé si le pegó la granada porque rebotó y tocó ese fierro”.
Más críticas de Bullrich contra los manifestantes
Para Bullrich, la clave está en la naturaleza de la protesta, que incluyó la participación de grupos de izquierda y barras bravas.
La funcionaria sostuvo que “lo que sucedió el miércoles está totalmente por fuera de la Constitución”, argumentando que “la alteración al orden público, la destrucción de lo que hay en el camino, el ir a una plaza a romper todo lo que te encontrás mientras vas caminando, ir con armas de fuego, armas blancas, romper y utilizar los palos como armas, eso no está dentro del derecho a peticionar”.
En este sentido, calificó la situación como “una batalla para intentar generar una degradación de los valores democráticos de nuestro país e imponer algo que perdieron”.
Mientras tanto, Pablo Grillo permanece internado en el Hospital Ramos Mejía tras ser alcanzado en la cabeza por una cápsula de gas lacrimógeno. Su padre informó que, si bien su pronóstico aún es reservado, su estado es “estable” y que incluso hubo una “evolución positiva” tras una segunda intervención quirúrgica. Grillo se encontraba trabajando de manera independiente cubriendo la marcha cuando fue impactado por el proyectil proveniente del lado de las fuerzas de seguridad. El hecho dejó un saldo de 23 civiles heridos, incluyendo a Grillo, y también algunos efectivos policiales.
La situación del fotoperiodista generó diferencias entre Bullrich y el jefe de Gobierno porteño, Jorge Macri, quien pidió tener más cuidado durante los operativos. La ministra respondió a estas críticas con firmeza: “Cuando uno toma una decisión, luego hay que bancar. No vale correrse”.
Desde la oposición, la titular del Partido Justicialista, Cristina Kirchner, acusó directamente al presidente Milei de mandar a “apalear viejos” y “fusilar” a un fotógrafo, refiriéndose al caso de Pablo Grillo.
El gobierno nacional, a través de Bullrich, se mantiene firme en su postura, defendiendo el accionar de las fuerzas de seguridad y condenando la violencia de la protesta.