El presidente Alberto Fernández no solamente mantiene en su cuenta personal de Twitter centenares de gruesos insultos realizados contra numerosas personas, sino que también ha dejado allí numerosas pruebas de cómo reaccionaba frente al problema de la inflación cuando se encontraba en la oposición.
Con 123 por ciento de inflación acumulada desde que asumió en diciembre de 2019 y con pronósticos que señalan una cifra superior al 70 por ciento anual de inflación para 2022, Alberto Fernández sale perdiendo en la comparación con todos los presidentes de la era democrática.
La única excepción es el mandato del presidente radical Raúl Alfonsín, quien experimentó la peor hiperinflación sufrida por el país, hace ya más de 30 años. Según un estudio de la Cámara Argentina de Comercio y Servicios, Alfonsín terminó su mandato en 1989 con un promedio de 398,1 por ciento de inflación anual.
Inflación: lo que Alberto Fernández decía ayer...
Ahora que Fernández es el receptor de las críticas por la inflación que no puede controlar su administración, sirve ver cuáles eran sus reacciones cuando anteriores mandatarios tampoco podía contra el índice inflacionario, si bien aquellos tenían mejores cifras que las que tiene ahora él.
Las durísimas críticas que el actual mandatario realizaba por su cuenta de Twitter, tuvieron como principales destinatarios a los presidentes Cristina Fernández y Mauricio Macri.
Lo llamativo es que un repaso por sus publicaciones de los siete años anteriores a que asumiera la presidencia, son un viaje crítico por las cifras de inflación, desempleo, valor del dólar, pedidos de ayuda al Fondo Monetario, etcétera, todos indicadores que han empeorado durante su gestión o situaciones que, ante la falta de opciones, debió repetir.
Muchos de los centenares de mensajes que Alberto Fernández escribió en Twitter sobre la inflación, tienen como blanco favorito a Mauricio Macri. “Un presidente que no sabe cómo eliminarla”, lo calificó en un tuit del 4 de agosto de 2019.
En una docena de tuits, Alberto Fernández repite que fueron los radicales los principales responsables de llevar al país por el camino de la inflación, y menciona a Raúl Alfonsín. A veces, con insultos, como en el tuit anterior: “Te ruego hagas el esfuerzo de no ser tan pelotudo”, responde a una persona que lo criticó.
Varias veces el objetivo de las críticas de Fernández fue el ministro de Hacienda de Macri, Nicolás Dujovne. En este caso, critica las cifras de inflación y pobreza de 2019, bastante mejores que las que muestra actualmente su gobierno, con un nivel de pobreza que hoy afecta al 37 por ciento de la población.
En el tuit anterior, critica a Macri por la inflación y por pedir auxilio al FMI y califica esas políticas de “penosas”. La historia se repite en Argentina.
Antes de que asumiera Macri, las críticas de Alberto Fernández por la inoperancia del gobierno nacional en el combate contra la inflación iban dirigidas a la presidenta Cristina Fernández. “Autocrítica de CFK? Habló de la pobreza ocultada y la inflación silenciada?”, la atacaba en 2017.
“Cristina miente”
“La Presidenta miente y el Vice roba”, escribía con relación a la inflación, en 2012, refiriéndose a Cristina Fernández y a Amado Boudou.
En 2013, la crítica contra el gobierno de Cristina Fernández la recibía el ministro de Economía Hernán Lorenzino. “Así está el gobierno. Negando la realidad a cada instante. Qué pena”.
Ese mismo año, llamó traidores a los miembros del gobierno de Cristina Fernández que negaban la importancia de la inflación.
Luego de numerosos desbordes discursivos que cometió en el manejo de sus redes personales o en actos públicos, a Fernández le colocaron una vocera presidencial, Gabriela Cerruti, y dejó de emitir tuits sorpresivos en horas de la madrugada o de llamar a amigos conductores de programas radiales para salir al aire, sin haberle avisado a sus encargados de comunicación.
Pero su cuenta de Twitter, aunque ya más calma, no deja de exhibir las contradicciones sobre cómo se manifiesta un político frente a los mismos temas, cuando está en el gobierno o se encuentra en el llano de la oposición.
